Déficit de estados y municipios: advertencia reiterada

por | Ago 1, 2014 | Agosto 2014, Gobierno Eficaz | 0 Comentarios

En marzo de 2014, la deuda de estados y municipios ascendió a 481 mil millones de pesos (mdp), mientras que en 1995 era de apenas 41.1 mil mdp. Esto implica un incremento de 1,071% en términos corrientes, con un incremento récord en 2010, según los datos de la Secretaría de Hacienda (SHCP). La variación en el incremento de la deuda pública cambia de estado en estado, pero el aumento general no deja de ser alarmante.

Hasta el primer trimestre de 2014, el porcentaje mayor de la deuda de las entidades subnacionales lo había contratado el gobierno estatal (57.9% en promedio), los municipios contrataron un promedio mucho menor (5.6%). En ambos niveles de gobierno se han aumentado las obligaciones crediticias.

En septiembre de 2013 se aprobó en la Cámara de Diputados un proyecto de decreto para reformar la Constitución en materia de disciplina financiera de los estados y municipios.

Éste prevé la facultad del Congreso de la Unión para aprobar las leyes generales para el endeudamiento de los estados, la obligación de transparentar el total de la deuda que contraten y sus obligaciones de pago. Establece también un sistema de alerta sobre el manejo de deudas y un sistema de sanciones para los servidores que no cumplan con estas disposiciones.

La reforma aprobada en diputados es una buena medida para controlar el crecimiento desmedido del endeudamiento público de los estados. Sin embargo, la iniciativa quedó en la “congeladora” y no ha sido aprobada por los senadores desde que se turnó a comisiones en septiembre de 2013.

Sin controles reales al endeudamiento público, la contratación de deuda pública mantiene los incentivos perversos que han llevado los pasivos contables a cifras tan altas. Estados como Coahuila, Hidalgo, Michoacán, Nayarit, Oaxaca y Veracruz han incrementado sus pasivos por encima del promedio nacional.

El sistema de incentivos perversos que promueve la irresponsabilidad fiscal de los estados queda expuesto cuando se compara el porcentaje de la deuda que cubre la federación con el porcentaje que cubren los ingresos propios de las entidades.

 

Alcaldes_de_México_Agosto_2014_Deudas_Estados

A este problema se suman las advertencias de las calificadoras de deuda que han señalado los riesgos que pueden enfrentar los estados por el sostenimiento de sus sistemas de pensiones. En julio, Moody’s advirtió que los estados tienen un rango muy amplio de pasivos por pensiones no fondeadas (entre 0.9% y 546% de sus ingresos): tan solo en 12 entidades esta deuda excede 100% de sus ingresos. Tal varianza se explica por la falta de lineamientos federales para la administración de estos pasivos.

Para solucionar este problema varios estados han tenido que reformar, pero esos cambios serán insuficientes en el corto plazo y se terminará presionando las finanzas estatales.

El endeudamiento desmedido de las entidades afecta la gobernabilidad y genera un sistema de irresponsabilidad fiscal que no sólo pagan los actuales ciudadanos, sino que se traslada a las generaciones futuras. Aunado a ello, no existen los mecanismos de transparencia y rendición de cuentas que ayuden a que la deuda pública de los estados se destine a inversiones productivas. Es necesario impulsar un sistema integral de monitoreo de la deuda, tanto en la contratación como en el destino de la misma. La discrecionalidad de las finanzas públicas locales pone en riesgo la implementación de reformas estructurales como la fiscal, la de transparencia, incluso la energética.

Es necesario controlar el gasto público de los estados y municipios y “cerrar la llave” del financiamiento que se abrió en 1995, cuando se reformó la Ley de Coordinación Fiscal y se permitió a las entidades contratar deuda directamente con la banca comercial y ofrecer el flujo futuro de las transferencias federales como garantía. La banca comercial ha encontrado un negocio muy rentable al financiar a las entidades. Sin embargo, esto ha generado mayor endeudamiento de los gobiernos y menor crédito al sector productivo, lo que irremediablemente afecta el crecimiento económico del país.

Ugalde, Gráfica, Déficit

Luis Carlos Ugalde

El autor es director General de Integralia Consultores. Ha sido consejero presidente del Instituto Federal Electoral en 2003- 2007, funcionario en diversas dependencias del Gobierno Federal, así como investigador en varias universidades de Estados Unidos y México. www.integralia.com.mx

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

La relevancia del número de predial

La relevancia del número de predial

En la era de la digitalización hacer cualquier trámite es más sencillo y el sector inmobiliario en México no es la excepción. Un ejemplo de ello es...