Una de las más viejas y peligrosas guerrillas del continente americano está constituida por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, que llevan más de 40 años en actividad. Aunque iniciaron acciones como un grupo que levantaba demandas agrarias, en los años recientes se han demostrado sus vínculos con el narcotráfico, además de su participación en diversos hechos delictivos, como terrorismo y secuestro.
Si bien algunos de sus nexos y actos ya eran conocidos en ciertos círculos periodísticos, el valioso material obtenido de las computadoras del segundo jefe en importancia de la organización, tras el asalto a su cuartel localizado en la frontera de Ecuador con Colombia, deja al desnudo los numerosos apoyos y negocios que el grupo guerrillero tiene en diversos países, incluyendo a México.
Pese a que todavía cuentan con el ingenuo apoyo de ciertos grupos radicalizados, las FARC son el mayor grupo dedicado a la extorsión y el secuestro, y sus actividades son sostenidas con dinero directamente obtenido del narcotráfico. Aquí están documentadas sus ligas con el crimen organizado del país.
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