Zihuatanejo de Azueta, Gro.- Un atractivo programa de incentivos fiscales, así como trabajos de renovación de la imagen urbana y una intensa campaña de promoción, son algunas de las acciones que prepara el gobierno de este ayuntamiento para atraer a los inversionistas del sector turístico.

Como es de conocimiento general, el destino Ixtapa-Zihuatanejo constituye uno de los sitios de recreación más importantes del estado de Guerrero, que junto con los ayuntamientos de Acapulco y Taxco, integra el llamado Triángulo dorado del sol. Sin embargo, la inseguridad y la falta de inversión en infraestructura han provocado que el ayuntamiento haya perdido parte de su brillo.

En aras de reforzar a la “industria sin chimeneas”, la actividad productiva más importante de la demarcación, Eric Fernández Ballesteros, presidente municipal de Zihuatanejo, hace ver que su gobierno no será un obstáculo, sino un aliado de la comunidad empresarial.

“Vamos a dar a conocer incentivos fiscales para que, quienes quieran invertir en el municipio, lo hagan de manera cómoda y que sepan que no se va a abusar de ellos.”

Por lo pronto, el ayuntamiento ha comenzado trabajos de remozamiento de fachadas y también prevé la rehabilitación de banquetas, pavimento, así como de la red hidrosanitaria. No obstante, Fernández Ballesteros, cuya administración comenzó con falta de liquidez y deudas por 200 millones de pesos (mdp), refiere que las capacidades económicas del ayuntamiento son limitadas para elevar la calidad de los servicios públicos urbanos y el equipamiento turístico.

FALTAN APOYOS FEDERALES.

“No podemos solos. Se requiere coordinación con el gobierno del estado y la Federación”, refiere el alcalde, sobre todo si se toman en cuenta otros proyectos que también hacen falta, como la construcción de un centro de convenciones —que se ha pospuesto por varios años—, además de la conexión carretera que se tiene prevista con la autopista Siglo XXI de Lázaro Cárdenas.

Eric Fernández, quien es administrador de empresas, también menciona la necesidad de remodelar los muelles, pues admite que varios de ellos están obsoletos, lo que reduce su capacidad para recibir cruceros. Sin embargo, reitera: “No lo podemos hacer en lo individual como municipio, necesitamos el apoyo de la Federación y del gobierno del estado”.

Sobre la limpieza de las playas, la presidencia municipal asegura que sólo la playa principal, de las cuatro que componen la bahía de Ixtapa-Zihuatanejo, ha tenido un ligero incremento de enterococos, lo que se ha atendido mediante un mejor control de las aguas residuales. La estrategia ha consistido en hacer un tratamiento del vital líquido más eficiente, así como en identificar y clausurar vertederos clandestinos y sancionar a los infractores.

NÓMINA ACOTADA.

Por los problemas económicos que encontró en la administración local, Fernández Ballesteros —quien desde los 15 años de edad milita en el Partido Revolucionario Institucional (PRI)—, hizo despidos de personal a finales de 2012, situación que le provocó problemas con ex trabajadores y con opositores de su gobierno. Incluso, hubo protestas en las oficinas municipales.

“Nosotros hemos hecho cambios de personal de confianza, de gente que a lo mejor no tenía mucha razón de estar ahí. Desde luego que esos cambios molestan, como lo hemos visto en esos días”, explica el alcalde quien aclara que a la fecha el ayuntamiento labora normalmente.

Sobre los señalamientos públicos, en el sentido de que no ha cumplido con sus compromisos de campaña, el alcalde responde que se trata de simpatizantes políticos que le pidieron ser contratados en las oficinas municipales.

“De los 23 mil votos con los que prácticamente se ganó la elección, un aproximado de 50 por ciento de esos votantes quisieran empleo en el ayuntamiento”, comenta el edil. Por consecuencia, asegura que no hará caso de esas peticiones “en beneficio del propio municipio”, ya que se cuenta con una plantilla de 1,300 a 1,400 trabajadores, lo que considera “una cantidad exagerada”.

RECAUDACIÓN DEL PREDIAL.

Eric Fernández —quien pertenece a una familia política regional, ya que su padre y su abuelo también han sido alcaldes, aunque de diferentes demarcaciones— comenta que, al tomar posesión del ayuntamiento, se encontró con números rojos, debido a que el municipio adeuda 200 mdp, con proveedores, bancos, el gobierno estatal y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), entre otros acreedores.

“Para poner orden en la casa”, como él lo define, se han emprendido medidas de austeridad y también se ha tratado de recuperar la recaudación, vía el impuesto predial. Comenta que varias empresas habían acumulado hasta cinco años de no pagar ese gravamen, por lo que el municipio decidió condonar algunas cantidades, para que esos morosos se pusieran al corriente. Asimismo, se han colocado módulos de atención en las colonias para invitar a los ciudadanos a cumplir con sus obligaciones.

En el caso particular de la Comisión de Agua Potable de Zihuatanejo, que tenía un pasivo de 20 mdp con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), el ayuntamiento se acogió a una serie de convenios impulsados por la Federación, pero también a la venta de algunas propiedades de la municipalidad. Por lo que, a la fecha, prácticamente se ha cubierto dicha deuda. Asimismo, se han entablado acuerdos con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) —que incluyen la venta de un terreno propiedad del ayuntamiento—para pagar 16 años de cotizaciones de los trabajadores del organismo de agua.

De esta forma, la administración municipal ha sufragado su funcionamiento, sin la necesidad de contratar nuevos créditos, asegura Fernández Ballesteros.

DE TAL PALO, TAL ASTILLA.

Frente a las críticas de la gente en contra de los hijos de políticos, el alcalde no tiene conflictos y lo asume con filosofía. “Muchos dicen: siempre los mismos personajes. Pero yo agradezco a mis padres, a mi abuelo, a mi familia, que me haya mostrado esta actividad que nos da grandes satisfacciones.”

En su opinión, es natural que el hijo de un político siga el ejemplo de sus padres, igual que los descendientes de un profesor, de un carpintero o de un pescador.

Con todo, el acalde defiende sus méritos para dirigir a la alcaldía, respaldado en su carrera política, la cual le ha permitido alcanzar cargos como líder de las juventudes del PRI en el estado, así como dirigente municipal del partido.

Sobre la seguridad pública, el munícipe refiere que su administración cooperará con las autoridades estatales y federales, pues recordó que está en marcha la operación de “Guerrero Seguro”, que pretende abatir los elevados índices de criminalidad que han azotado al estado.

“Tenemos algunas situaciones de asalto a vehículos en tramos carreteros, que son ajenos al municipio, pero que definitivamente afectan, porque se trata de las vías de comunicación que el turismo utiliza para llegar a Ixtapa-Zihuatanejo”, comenta Eric Fernández. Por lo pronto, dice que ha conversado con representantes del gobierno estatal y el comandante del sector naval, en aras de entablar una coordinación permanente para acciones de vigilancia.

EQUIPAMIENTO POLICIACO.

Pero esto no es todo. La administración municipal también ha invertido en el equipamiento de sus efectivos de seguridad, ya que se han entregado cuatro vehículos habilitados como patrullas marca TITAN. Asimismo, el alcalde informa que se tiene programada la compra de fusiles de asalto y la adquisición de uniformes de mejor calidad, además de que se trabaja con el gobierno del estado en la certificación del cuerpo policiaco, a través de las evaluaciones de control y confianza.

En materia de prevención del delito, también se ha realizado un estudio sobre las zonas con mayor incidencia delictiva y de alto riesgo, para preparar estrategias que disminuyan los índices de criminalidad, concluye Fernández Ballesteros.