Conquistan las grandes ciudades.

por | Mar 1, 2013 | Expediente Abierto, Marzo 2013 | 0 Comentarios

Sala de juntasAnte la nula presencia de gobernadoras, las presidencias municipales y las jefaturas delegacionales constituyen el principal bastión del poder político de las mujeres en el ámbito local. Incluso, en el mapa político, las mujeres ganan terreno en ciudades grandes. Algunas de ellas, como Monterrey, Nuevo León, y León, Guanajuato, estrenan la presencia de una alcaldesa.

Lo anterior como resultado del agitado proceso electoral de 2012 que, entre otras controversias, suscitó la exigencia de que se cumpliera la cuota de 40 por ciento de candidaturas a favor de las mujeres y de que las fórmulas fueran registradas con aspirantes del mismo género.

No obstante estos avances, aún queda mucho trecho por andar, ya que apenas 17 ayuntamientos de más de 250 mil habitantes están gobernados por féminas.

MUJERES EN 7% DE LAS ALCALDÍAS.

En el último trienio, la cifra de alcaldesas y delegadas ha crecido cerca de un punto porcentual, al pasar de 148 en 2009 —equivalente a 6 por ciento— a 170 en 2013 —7 por ciento—, según datos generados por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Entidad de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (ONU Mujeres), el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y reportes periodísticos.

Para conocer más de cerca esta realidad, Alcaldes de México conversó con 10 presidentas municipales de ciudades con poblaciones superiores a 250 mil habitantes, quienes platican sus experiencias para gobernar un ayuntamiento de ese tamaño.

Las munícipes de Aguascalientes, La Paz, León, Monterrey, Texcoco, Toluca, Veracruz y Xalapa; así como las delegadas de Iztacalco y Tlalpan coinciden en que las acciones afirmativas han permitido que más féminas puedan llegar a puestos de responsabilidad. Incluso, confían que en un plazo no mayor a 10 años, las cuotas de género ya no serán necesarias, pues la paridad entre hombres y mujeres en política será natural.

Pero después de conquistar el poder, refieren que el mayor desafío consiste en atender las necesidades de sus ciudadanos, garantizar la calidad de los servicios públicos y preservar la seguridad, además de conciliar estas responsabilidades con su rol de madres de familia. Agregan que esta condición les da capacidades para resolver problemas de manera más eficiente, ya que tienen la experiencia de solucionar dificultades en el hogar.

Lorena MartínezLorena Martínez Rodríguez.
Aguascalientes, Ags.

Para tener éxito en una actividad como la política se necesita mucha vocación, disposición y absoluta convicción, porque hay un costo político y uno personal también. Generalmente el costo personal es ser solteras, no tener una relación de pareja muy estable, no tener una familia, refiere la alcaldesa hidrocálida. Por lo que hace al costo político, advierte: “Tienes que demostrar dos veces tu capacidad o trabajar más”.

Confiesa que no ha estado ajena a vivir la discriminación. “No existe en México una mujer que no se haya visto de alguna u otra manera víctima de estas expresiones, generalmente más asociadas a la preconcepción de que hay ciertas tareas que las mujeres no estamos preparadas para desarrollar.”

Sin embargo, dice estar convencida de que las acciones afirmativas son muy importantes. Refiere que en el panorama político nacional hay mujeres muy valiosas que marcan una diferencia y un estilo de gobierno, que bien puede abrir muchas puertas para que en los próximos años haya una gobernadora.

Elizabeth MateosElizabeth Mateos Fernández.
Iztacalco, DF.

La jefa delegacional de esta demarcación lamenta que exista misoginia en la política. “A las mujeres se les llama para volantear, para pegar carteles, para invitar a las vecinas a votar, para organizar, para hacer las tortas, pero nunca para dirigir. Entonces cuando las mujeres dirigimos es porque tenemos la capacidad y porque nos lo ganamos.”

Dice que, afortunadamente, en la capital del país se han observado avances. “Si ahorita en el DF somos cinco jefas delegacionales, hay que buscar que posteriormente seamos ocho y lograr que por ley, como mínimo, 50 por ciento de las jefaturas delegacionales esté ocupado por mujeres.” La delegada no piensa que los hombres gobiernen mal, pero considera que por ser minuciosas, las mujeres son muy buenas administradoras.

Esthela PonceEsthela de Jesús Ponce Beltrán.
La Paz, BCS.

La presidenta municipal se congratula de gobernar la capital de su estado, pero disiente de sus colegas alcaldesas al manifestar que no hay un número tan amplio de mujeres al frente de grandes ciudades como en otro tipo de localidades.

En general, considera que no se pueden echar las campanas al vuelo. “Ocupamos poco más de 5 por ciento de todas las presidencias municipales y es un reto para todas las que hacemos política buscar un escenario donde se demuestre la calidad del trabajo.”

Ponce Beltrán observa dos aspectos positivos: la capacitación de las mujeres e instrumentos legales favorables a las féminas, pero en su opinión “hace falta que las mujeres empecemos a entender que somos líderes políticas”. Prevé que, en una década más, habrá nuevas generaciones con una visión diferente.

Marisela ContrerasMarisela Contreras Julián.
Tlalpan, DF.

La jefa delegacional de esta demarcación lamenta que los partidos políticos se conformen con cumplir con la ley, pero sin conceder un mayor protagonismo para las féminas. “Dan cobertura para que las mujeres estemos presentes, pero no nos dan los espacios de dirección, ésos los hemos tenido que ganar.”

Dice que el desafío es generar sinergias entre todos los sectores de la sociedad, para que se reconozcan las aportaciones de las mujeres en la política. “Si volteamos a ver las trayectorias de las mujeres que han estado en cargos de gobierno, ahí está la constancia de que es posible.”

También opina que lo ideal sería prescindir de institutos de la mujer, pero acepta que son necesarios para acortar las brechas de desigualdad.

Margarita ArellanesMargarita Alicia Arellanes Cervantes.
Monterrey, NL.

A lo largo de su carrera, la alcaldesa regia se ha desempeñado en diferentes espacios como el Registro Público de la Propiedad, la Dirección de Desarrollo Político del gobierno del estado y la Delegación estatal de la Secretaría de Desarrollo Social. Pero una vez que ha conquistado la presidencia municipal, dice que su reto más importante es regresarles a los regiomontanos la seguridad y la tranquilidad.

“No creo que el desempeño de una mujer en un cargo como éste sea un asunto de género, sino de capacidades, visión y experiencia. Si en algo influye el género es en la pasión que le pones a cada uno de los temas. Las mujeres a veces somos muy insistentes. Ya que nos proponemos algo, siempre tratamos de lograrlo”, considera Arellanes.

En su opinión, México debería tener no sólo alcaldesas, diputadas y senadoras, sino también gobernadoras y una presidenta de la república. Dice que para lograrlo, no sólo cuenta la preparación académica, ya que además hace falta práctica y el conocimiento que se adquiere en los cargos con responsabilidades.

Delfina GómezDelfina Gómez Álvarez.
Texcoco, Edomex.

Un desafío que tuvo que enfrentar la munícipe Gómez Álvarez ha sido su falta de experiencia política. “Antes de ser alcaldesa fui profesora de una escuela primaria y para mí ha sido todo un reto dirigirme a los ciudadanos, porque como ciudadana común no manejo el discurso político”, confiesa la mandataria. Sin embargo, considera que en la medida en que es soltera, le ha sido más fácil estudiar, trabajar y prepararse. “Puedo estar más atenta al trabajo y pasar más tiempo en los asuntos del ayuntamiento, sin la preocupación de dejar a los hijos o al esposo desatendidos.”

Opina que, para abrir más espacios en posiciones de poder, hace falta que las mujeres confíen en sus capacidades, porque las féminas “siempre pensamos en el bien común”. No obstante, está consciente de que los resultados son fundamentales: “En la medida que yo desempeñe un buen papel, es probable que después otra mujer contienda por este puesto, lo cual nos llevaría a romper paradigmas”.

Bárbara Botello1María Bárbara Botello Santibáñez.
León, Gto.

Esta mujer guanajuatense se ha caracterizado por romper paradigmas en su estado. Ha sido la primera mujer presidenta del Colegio de Abogados de León, la primera dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), la primera candidata de ese partido a la alcaldía de la ciudad y la primera presidenta municipal de León.

Relata que tomó la decisión de divorciarse en pleno proceso electoral, lo que provocó una campaña de desprestigio de sus opositores, quienes colocaron anuncios espectaculares con mensajes agresivos. “Me decían que si no había podido unir a mi familia no podría unir a los leoneses, o que las Barbies son para jugar, no para gobernar.”

Confía en que a futuro no haya necesidad de hablar de institutos para mujeres o cuotas de género, sino que se entienda que la perspectiva de hombres y mujeres es complementaria. “El camino va” dice la alcaldesa.

Martha GonzálezMartha Hilda González Calderón.
Toluca, Edomex.

En el Valle de Toluca se ha gestado un fenómeno particular, ya que la mayoría de los municipios de la zona son gobernados por presidentas municipales. “Fue una apuesta de los ciudadanos y queremos quitarnos ese prejuicio de que las mujeres juntas ni difuntas”, dice Martha Hilda González, la alcaldesa de la capital del estado.

Todo lo contrario, continúa la munícipe: “Tenemos una comunicación fluida en asuntos de seguridad, servicios, transporte y pienso que ése debe ser el modelo para decir que las mujeres no venimos a reproducir los patrones masculinos”.

Revela que gobernar Toluca no es fácil, porque es la sede de los tres poderes del Estado de México, además que ahí habita un vecino distinguido que es el gobernador Eruviel Ávila. Considera que las cuotas de género también han obligado a que las aspirantes se preparen mejor con el propósito de no desencantar a quienes votaron por ellas.

Elizabeth MoralesElizabeth Morales García.
Xalapa, Ver.

La alcaldesa xalapeña reconoce que ser una mujer política no es sencillo. Comparte que “en la competencia para llegar al ejercicio público, hay reglas no escritas, como los golpes bajos”. Sin embargo, dice, “son reglas que tenemos que conocer y jugar con ellas”.

Refiere que las mujeres están más expuestas a la crítica, tanto en lo institucional como en lo personal. De modo que la respuesta debe ser más contundente: “Eso nos motiva a tener resultados de forma constante, a tener una vida personal e institucional mucho más ordenada y a dedicarnos en cuerpo y alma a esta actividad, para que la gente vea nuestrom trabajo.”

Frente al hecho de que actualmente no exista una sola gobernadora, considera que las circunstancias nacionales y regionales no han sido favorables. Pero no pierde las esperanzas de que pueda haber otra mandataria estatal.

Carolina GudiñoCarolina Gudiño Corro.
Veracruz, Ver.

A decir de esta mandataria, el avance político de las mujeres ha sido positivo. Informa que, después de 492 años de la fundación del ayuntamiento, ella es la primera alcaldesa que lo encabeza.

“Es una tendencia que va en crecimiento. Un ejemplo, además de los ayuntamientos, es el resultado obtenido en el Senado y en la Cámara de Diputados, donde se obtuvo un porcentaje histórico en la participación de mujeres”, comenta la alcaldesa.

Estima que este fenómeno no es obra de la casualidad, “sino de la confianza de los ciudadanos en las mujeres para desempeñar cargos públicos, sustentado en la transparencia, el trabajo y los buenos resultados que caracterizan a nuestro género”.

Carolina Gudiño ha enfrentado dificultades como los estereotipos, las prácticas de beneficio de grupos y no del colectivo, además del “fuego amigo” que se da en todos los partidos y la guerra sucia de otras organizaciones.

 

Aumentan los mpos

David Galicia Sánchez

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *