Oposición en el Congreso, en busca de contrapesos

por | Feb 28, 2019 | Expediente Abierto, Febrero 2019 | 0 Comentarios

Senadores y diputados federales de partidos distintos a Morena han encontrado vías para equilibrar las fuerzas en el Congreso de la Unión, no obstante, destacan la importancia de ser una oposición moderna, constructiva y propositiva.

FOTO: GALO CAÑAS /CUARTOSCURO.COM

► Por Mónica Romero

► Juan Carlos Romero Hicks FOTO: ISAAC ESQUIVEL / CUARTOSCURO

Después del triunfo de Andrés Manuel López Obrador y del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en las elecciones del 1° de julio de 2018, es común escuchar frases como “la aplanadora de Morena” o “AMLO se llevó el carro completo”, asimismo, que la mayoría en el Congreso le permitirá al nuevo gobierno hacer reformas a su antojo o derogar las llamadas reformas estructurales aprobadas durante la administración de Enrique Peña Nieto. Pero, ¿realmente existe esta aplanadora?

“Para reformas a la Constitución no, pero para leyes reglamentarias sí, porque tienen el sí de manera automática”, explica Juan Carlos Romero Hicks, Coordinador de los diputados del Partido Acción Nacional (PAN). El Legislador asegura que “no basta con tener la mayoría numérica, sino que es necesario ver siempre la posibilidad de construir acuerdos, nadie es el dueño de la verdad absoluta y la no competencia generaría incompetencia, por lo que es sano que existan otros criterios.”

La mayoría absoluta es el porcentaje de votación correspondiente a la mitad más uno de los integrantes de alguna de las cámaras al momento de hacer una votación, por lo que el bloque de partidos que conformó la coalición Juntos Haremos Historia, encabezado por Morena, puede aprobar asuntos legislativos aún sin el consenso de los demás partidos.

En cuanto a las reformas constitucionales, según el Artículo 135 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, una reforma a la Carta Magna es posible únicamente si se cuenta con el voto a favor de la mayoría calificada, esto es, las dos terceras partes de los legisladores presentes, previo cumplimiento de quorum.

De tal manera que, en la Cámara de Diputados, se necesitan los votos de 334 diputados y en el Senado de la República se requiere la aprobación de 85 senadores. Esto sería en el entendido de que se encontraran presentes en su totalidad los legisladores de cada una de las Cámaras.

Según los reglamentos de San Lázaro y del Senado, se considera que existe quorum cuando están presentes el 50 por ciento más uno de sus integrantes: 251 diputados y 65 senadores, respectivamente.

La reforma constitucional debe ser aprobada por las dos Cámaras del Congreso de la Unión y posteriormente promulgada por el titular del Ejecutivo Federal, quien después la publicará en el Diario Oficial de la Federación. Además, tiene que ser avalada por 17 congresos locales. Hay que recordar que en los estados, Morena es mayoría en 19 congresos.

LA PRIORIDAD COMO DIVISA

Ante este panorama, Romero Hicks señala que el papel de la oposición debe ser el de una oposición moderna, constructiva y propositiva, que requiere tener propuestas innovadoras para jugar un papel significativo y sobre todo para poder incidir de manera positiva en las decisiones que afecten al país.

Los legisladores de fuerzas políticas de oposición coinciden en que en una democracia hay que entender la prioridad como divisa y no como un legado.

Romero Hicks refiere que para que las fuerzas políticas de oposición puedan hacer un contrapeso efectivo al peso en el Congreso de la Unión, tienen que entender que dicho contrapeso debe venir primero de la sociedad.

“La sociedad civil puede hacerlo otra vez, desde diferentes organizaciones, desde los sindicatos, las cooperativas, desde las universidades, también los empresarios, las iglesias, así como las mujeres y los organismos en pro del medioambiente, en fin, la lista es evidentemente mucho más amplia”.

Asimismo, apunta la importancia de otros contrapesos constitucionales, como son los congresos locales, los ayuntamientos y los propios gobernadores.

► Juan Zepeda FOTO: ISAAC ESQUIVEL / CUARTOSCURO

Por su parte, el senador del Partido Revolucionario Juan Zepeda expone que las diferencias políticas en la Cámara Alta han propiciado que los partidos distintos a Morena se unan para conformar un contrapeso sólido, pues es en esa Cámara en la que se desahogan las reformas constitucionales o los nombramientos que requieren las dos terceras partes para ser aprobados.

Una muestra de lo anterior es que, a pesar de su indudable mayoría, la fracción de Morena en el Senado de la República consiguió con trabajos que se aprobara la propuesta para entregar la medalla Belisario Domínguez, lo mismo le sucedió con el nombramiento de la titular del Sistema de Administración Tributaria (SAT), porque los legisladores de oposición abandonaron el salón de plenos.

En conjunto, los senadores de minoría han logrado congelar sesiones por falta de quorum, con resultados como el que la Medalla Belisario Domínguez se entregara apenas con 65 votos a favor, la votación más baja en la historia de la entrega de esta presea, que en otros años se había dado por unanimidad. Asimismo, la designación de Margarita Ríos Farjat al frente del Servicio de Administración Tributaria, apenas tocó los 67 votos para asumir el puesto.

Mónica Romero

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