Los proyectos de infraestructura de autotransporte público que estuvieron por años fuera del radar, se han puesto de moda en los últimos años. Ahora, en diversas ciudades hay obras de trenes suburbanos, Metrobús y Metro, por ser rápidos y poco contaminantes.
Aguascalientes, Hidalgo, Puebla, Yucatán, Guerrero y el Distrito Federal, entre muchos otros estados, tienen sobre la mesa proyectos de ese tipo, aunque algunos aún están en el proceso de evaluación, hay otros que ya están por concretarse.
Entre los más avanzados está la Línea 12 del Metro que se construye en la capital de México y que tiene un costo de 21 mil millones de pesos (mdp). La obra comenzó el 23 de septiembre de 2009 y se espera que inicie operaciones a principios de 2012.
En Yucatán, en tanto, el proyecto del Tren Transpeninsular está muy avanzado —ya se tienen los estudios técnicos—, análisis de costo-beneficio y el esquema financiero, pero todavía no se define cuándo se pondrá la primera piedra, asegura el secretario de Obras Públicas de dicho estado, Francisco Torre.
“Sabemos de la complejidad del fin de sexenio, sobre todo para continuar con las grandes obras de infraestructura; pero esperamos que con el presupuesto federal, el estatal y la participación de la iniciativa privada la obra se inicie en 2012”, confía.
Ello porque para la primera etapa del Tren Transpeninsular —transporte que correrá de la ciudad de Mérida a Punta Venado, equivalente a 278 kilómetros de distancia— se requerirán 11 mil 209 mdp. Pero a futuro, indica Torre, se contempla una segunda etapa que cubriría la ruta Puerto Progreso-Mérida-Campeche.
H
ay otros proyectos que ya iniciaron, como la construcción del primer corredor de la zona metropolitana de la Red Urbana de Transporte Articulado en Puebla, una obra que benefi ciará a 400 mil personas y cuya primera piedra se puso el 30 de noviembre de 2011, destaca el presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera.
Los poblanos deberán esperar 13 meses para ver en operación este Metrobús, en cuya construcción participan los tres niveles de gobierno junto con la iniciativa privada. La obra costará 1,462 mdp. La participación del ayuntamiento en el proyecto consistirá en invertir en el concreto hidráulico de los carriles confinados para el Metrobús.
Las autoridades de Guerrero, por su parte, ya lanzaron la licitación para Escénica Alterna, un proyecto que incluye una remodelación total a la Costera, un Macrotúnel y un Metrobús. El llamado Acabús correrá por un carril confinado sobre la Costera y la avenida Cuauhtémoc.
El proyecto que se anunció en julio del año pasado costaría alrededor de 1,600 mdp, según información del gobierno de Guerrero, recursos que se obtendrían del ayuntamiento de Acapulco, del presupuesto estatal y del federal.
PARA TODOS.
Los incentivos comunes que hay en todos estos proyectos, expone el investigador del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) y consultor, Raymundo Tenorio, es su amplia accesibilidad popular, que generan reducciones notorias en los tiempos de traslado de sus usuarios, así como la disminución de las emisiones contaminantes al desalentarse el uso del automóvil.
Lo anterior, añade, se constata con sistemas de transporte que ya operan, como por ejemplo, el Tren Suburbano Buenavista- Cuautitlán en el que se estima una reducción del tráfico, y una disminución de 14 por ciento de las emisiones contaminantes —equivalentes a 8 mil 654 toneladas de hidrocarburos, monóxido de carbono y óxidos de nitrógeno y azufre—, de acuerdo con información de la Subsecretaría de Transporte de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT). A la reducción de la contaminación se suman ahorros para el pasajero, tanto en el tema económico como de tiempo, ya que el Suburbano tiene un costo de 14 pesos el recorrido completo y de 6 pesos si se toma de Cuautitlán a Tultitlán, calculándose una disminución de tiempo por pasajero de 2 horas 40 minutos.
“Hemos entrado en la moda del uso del Metrobús o transportes con carriles confinados, como parte del proceso de modernización”, dice Tenorio.
En estas obras todos ganan: los pasajeros, las empresas fabricantes de trenes, las ciudades mejoran el tránsito y las constructoras obtienen contratos por las millonarias obras. Y los mismos concesionarios de microbuses quedan protegidos porque en el caso del Metrobús se ha logrado que sean ellos mismos quienes obtengan la nueva concesión, comenta el experto del ITESM.
Por ejemplo, en la obra de la Línea 12 del Metro en el Distrito Federal, la empresa española Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF) consiguió el contrato de arrendamiento por 1,558 millones de dólares (mdd), por 30 trenes, cada uno de los cuales estará compuesto de siete vagones con una longitud de 20 metros y un ancho de 2.80 metros.
Éste será el tercer contrato que obtiene CAF, ya que equipó también las Líneas A y 2 del Metro de la Ciudad de México, en un contrato de venta de unidades y mantenimiento de las flotillas.
Para el proyecto del Tren Transpeninsular de Yucatán ya hay muchas constructoras interesadas en participar, tanto de México como de diversos países, entre éstos Canadá, España, Japón, Corea e Inglaterra, destaca al respecto Francisco Torre. Además de que los beneficios se concentrarán en el sector turismo, industria y comercio, porque de acuerdo con las proyecciones, por la mañana transportaría pasajeros locales y turistas, mientras que por la noche se utilizaría para llevar carga de Mérida, Yucatán, a Punta Venado, Quintana Roo.
En Yucatán hay grandes proveedores de materia prima y de mano de obra para toda la Riviera Maya y todo se podrá transportar en un tiempo de 1 hora con 40 minutos, lo que representaría un gran ahorro ya que actualmente el traslado toma 2 horas con 30 minutos, asevera el funcionario.
El turismo se beneficiará porque hay muchas personas que podrían ir de Quintana Roo a Mérida y viceversa, pasando por el Pueblo Mágico de Izamal, por Chichenitzá, la ciudad de Valladolid, la zona arqueológica de Cobá y Puerto Progreso, asegura Torre. La Escénica Alterna de Acapulco también despertó el interés de al menos 18 grupos constructores que compraron las bases de la licitación que lanzó el gobierno de GueGuerrero en septiembre pasado, siendo algunas empresas interesadas: ICA, IDEAL, OHL y GMD.
La licitación incluye una concesión de 20 años para la construcción y operación de tres bypasses del Megatúnel de 3.3 kilómetros y un camino de 4.7 kilómetros que conectarán la Costera con Acapulco Diamante, en un trayecto que se reducirá en tiempo, ya que actualmente toma una hora. Este plan integral en el que las autoridades estatales y municipales pretenden reorganizar el transporte público en Acapulco costará 2,500 mdp, además del costo del Metrobús.
Raymundo Tenorio advierte, sin embargo, que aun cuando hay proyectos que ya se están ejecutando o que están por iniciarse, no todos se podrán construir porque el costo a veces es más alto que el beneficio.
Y es que algunos se quedan en proyectos, pero otros logran concretarse.
Por eso, el alcalde de Puebla, Eduardo Rivera, asegura que “después de muchos años de promesas y gobiernos estatales, se hace realidad la implementación de este esquema de transporte”, para el caso de dicho municipio.
Un proyecto que se mantiene en espera, por ejemplo, es el de Aguascalientes, en el que se proyecta construir un tren suburbano de 54 kilómetros de longitud que incluye 11 estaciones y que tendría un costo de aproximadamente 380 mdd.
En el texto del estudio hecho por el despacho RVDG arquitectura + urbanismo, se explica que comunicaría a los municipios de San Francisco de los Romos y Rincón de los Romos con la zona de Arellano; sin embargo, es un proyecto que se hizo en 2009 y que aún sigue sin concretarse.
Pero hay muchos otros planes de expansión de la infraestructura de transporte público y cuyos análisis técnicos se realizaron en 2011.
APOYO DE LA FEDERACIÓN.
La Subsecretaría del Transporte de la SCT contempló dentro del Presupuesto 2011 una partida de 100 mdp para el estudio técnico del Sistema de Transporte Urbano de Alta Capacidad Guadalajara-Zapopan. También se incluyeron 23.8 mdp para los estudios del proyecto de ampliación del Metro de Monterrey, Nuevo León, transporte al que no se le construyeron nuevas líneas ni infraestructura de 1994 a 2005.
La Línea 1 del Metrorrey inició operaciones en 1991 con una sola línea; tres años después, en 1994, se inauguró la Línea 2 y, aunque prácticamente durante una década no se invirtió para ampliarla —desde 2005 hasta 2008—, se han hecho ampliaciones y se estudia una próxima.
La SCT también destinó recursos para el proyecto ejecutivo del Tren México-Puebla, que consideró derechos de vía y estudios, y para lo cual se otorgaron 50 mdp. En tanto que para el Sistema de Transporte Colectivo Metro de la Ciudad de México, la SCT otorgó 2 mil mdp que se otorgarían mediante convenios al Gobierno del Distrito Federal.
En el Plan Nacional de Infraestructura el Ejecutivo Federal se comprometió a que al final del sexenio habría 100 kilómetros de vías destinadas al transporte de pasajeros urbanos. Esto se cumpliría con los tres sistemas de transporte suburbano previstos en las distintas entidades, pero hasta la fecha sólo opera el Sistema 1 del Tren Buenavista a Cuautitlán que tiene una longitud de 27 kilómetros.
En este caso, se mantienen pendientes los dos ramales del Sistema 1 que llevarían el servicio hasta Tecámac en dos diferentes rutas.
Los otros dos sistemas pendientes son: Chalco-La Paz, hasta Ciudad Nezahualcóyotl, el cual se estima tendría una inversión de 15 mil mdp, así como el de Ecatepec- Martín Carrera.
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