De 2006 a la fecha han sido asesinados 43 alcaldes en funciones, siete electos y 35 ex presidentes municipales, sumando 85 crímenes en los últimos 10 años.

La Comisión Nacional de Seguridad (CNS), la Asociación Nacional de Alcaldes de México (ANAC), la Asociación de Autoridades Locales de México (Almac) y de la Federación Nacional de Municipios de México (Fenamm), tienen listo el proyecto de protocolo de seguridad para presidentes municipales.

En el documento, al que tuvo acceso El Economista, señala que los estados con mayor riesgo de que un alcalde sufra amenazas o atentados son:

Guerrero, Michoacán, Oaxaca, Veracruz, Chihuahua, Estado de México, Durango, Tamaulipas, Chihuahua y Puebla, donde en los últimos años han sido asesinadas 85 autoridades municipales.

En contraste, las entidades donde las autoridades municipales no han sufrido prácticamente ningún ataque en la última década son: Coahuila, Morelos, Jalisco, Chiapas, San Luis Potosí, Guanajuato, Zacatecas y Nuevo León.

El proyecto que actualmente se discute en la CNS con integrantes de las asociaciones de alcaldes, contempla procesos a seguir en caso de un atentado, amenazas, lesiones, muerte u homicidio de un alcalde, así como de jefes delegacionales de la Ciudad de México, síndicos, regidores y funcionarios relacionados con seguridad pública municipal.

Destaca una propuesta de la ANAC, que plantea incluir en el protocolo la implementación de agentes especializados que serían reclutados, adiestrados y al mando de la Policía Federal.

Dichos agentes serían designados a los municipios pertenecientes a las dos regiones de mayor riesgo para los alcaldes, denominadas A y B, que incluyen a los estados de Oaxaca, Veracruz, Michoacán y Guerrero; así como Chihuahua, Durango, Estado de México, Tamaulipas y Puebla.

Con información de: El Economista