Municipios del Estado de México en la zona conurbada al Distrito Federal se han visto rebasados en la prestación de servicios debido a la migración de habitantes de la capital y de otros estados a las unidades habitacionales que se han instalado en ese territorio.
El crecimiento de este tipo de viviendas ha beneficiado a los gobiernos municipales con la captación de impuestos, pero no han ofrecido los servicios necesarios a la población que además se ve afectada por la saturación de las vías de comunicación.
Entre los municipios más afectados por la sobrepoblación ocasionada principalmente por la construcción y venta de unidades habitacionales de inmobiliarias particulares están Ixtapaluca, Chicoloapan, Valle de Chalco, Tultitlán, Tultepec, Cuautitlán, Tecámac y Acolman, entre otros.
Las afectaciones más graves son la falta de servicios como agua potable, drenaje y seguridad, además de la saturación de vías de comunicación como la carretera federal México-Texcoco, México-Puebla, México-Pachuca y México-Querétaro.
Otra deficiencia ocasionada por la proliferación de este tipo de construcciones es la distancia que deben recorrer sus habitantes para llegar a los centros de trabajo, principalmente en la Ciudad de México, por lo que muchas de las unidades habitacionales se encuentran deshabitadas.
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