Expediente Abierto

Salud

Covid-19, nuevo reto para la vida local

 

En la medida de sus atribuciones y posibilidades, los municipios han puesto en marcha y estrategias para solventar de manera eficaz la situación actual

 

Por David Galicia Sánchez
FOTO: CRISANTA ESPINOSA AGUILAR /CUARTOSCURO

El 29 de febrero de este año, México reportó la primera persona contagiada de Covid-19 en el país. Desde entonces, y hasta el cierre de esta edición, las cifras han ido en aumento. Para evitar que los contagios se propaguen sin control y esta situación colapse los sistemas de salud, el Gobierno Federal implementó medidas de contención, como la Jornada Nacional de Sana Distancia, mediante la cual, los ciudadanos recibieron la indicación de quedarse en sus casas.

Posteriormente, el Ejecutivo Federal emitió un decreto por el que se declara como emergencia sanitaria, por causa de fuerza mayor, a la epidemia de enfermedad generada por el nuevo virus SARS-CoV-2. A través de este decreto, se ordenó la suspensión inmediata de las actividades no esenciales, con la finalidad de mitigar la dispersión y transmisión del virus en la comunidad, disminuir la carga de enfermedad y las muertes ocasionadas por la misma.

Únicamente continuaron las actividades consideradas esenciales: la atención a la emergencia sanitaria, el trabajo en el ramo médico, seguridad pública y protección ciudadana, operación de los programas sociales del gobierno, así como las de los sectores fundamentales de la economía: financieros, recaudación tributaria, distribución y venta de energéticos, gasolineras y gas, generación y distribución de agua potable, industria de alimentos, entre otras enlistadas por el Gobierno Federal.

 

FUNCIONES LOCALES

De acuerdo con el Artículo 4º de la Ley General de Salud, los gobernadores de las entidades federativas son autoridades sanitarias. Atendiendo a ese mandato, los ejecutivos estatales han puesto en marcha acciones para enfrentar el problema, algunas, en línea con lo dispuesto por el Gobierno Federal, y otras que, a su consideración, son las más adecuadas para sus entidades. 

Los presidentes municipales, por su parte, no son autoridades sanitarias, sin embargo, encabezan el orden de gobierno más cercano a la población y, tal como lo dispone el Artículo 115º de la Constitución Política del país, tienen a su cargo las funciones y servicios de agua potable, drenaje, alcantarillado, tratamiento y disposición de sus aguas residuales, alumbrado público, limpia, recolección, traslado, tratamiento y disposición final de residuos, mercados y centrales de abasto, panteones, rastros, calles, parques, jardines y seguridad pública.

Los municipios no tienen la facultad de brindar servicios de salud, pero sí la de garantizar los servicios públicos y de vigilar e implementar acciones directas para que la población observe las disposiciones que ayudarán a disminuir la propagación de la enfermedad.

En condiciones normales, los municipios ejercen un presupuesto diseñado y autorizado para cubrir los gastos de operación de la administración pública, así como las obras y acciones necesarias para garantizar los servicios públicos.

Pero una situación como la pandemia que hoy enfrentan, en la que la actividad económica se detiene, impacta considerablemente en las finanzas locales y los presidentes municipales y sus cabildos tienen que implementar medidas para que los recursos que se tienen no sólo alcancen para cumplir con su mandato constitucional, sino también para apoyar a la población que, ante la emergencia, se ha quedado sin empleo, o que por su condición de vulnerabilidad requiere de apoyo.

Lo anterior, de acuerdo con Luis Guillermo Benítez Torres, Presidente Municipal de Mazatlán, Sinaloa, es uno de los factores que más preocupan a los ediles.

“Nosotros vemos con tristeza que no alcanzamos a dar el apoyo a todos los mazatlecos que están sin trabajo, de tal manera que estoy tocando puertas para buscar recursos económicos para los meses de mayo y junio, y evitar que la falta de los mismos genere problemas de inseguridad en la ciudad. Esa es nuestra principal necesidad, recursos en dinero o en especie, para brindar apoyos sociales.”

Por su parte, Adán Larracilla Márquez, Secretario Ejecutivo de la Asociación Nacional de Alcaldes (ANAC) coincide en que los recursos financieros son una de las principales necesidades de los gobiernos municipales en estos momentos, sobre todo, para brindar apoyos estratégicos.

“Por ejemplo para las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes), que se les apoye para pagar rentas y otros gastos, los municipios no tienen dinero para eso y cualquier fondo sería insuficiente; por ejemplo, una empresa que paga 20 mil pesos de renta, si se les apoyara y son mil las que vienen a solicitar la ayuda, ya son 20 millones de pesos, sólo para rentas, además está el pago de sueldos. Esas cosas son necesidades recurrentes que hemos visto”, apunta.

A la par de los recursos, los alcaldes se enfrentan al reto de generar conciencia en la población y sensibilizarla para acatar las medidas de aislamiento y sana distancia.

“Desafortunadamente, México es tan sui generis, tan diverso, que hay una gran cantidad de personas que están en sus casas, pero también hay muchos lugares en los que la gente anda en los mercados, en las calles como si realmente nada estuviera sucediendo. Actualmente solo son recomendaciones, no es obligatorio que la gente esté en sus casas, es cuarentena voluntaria y así lo estamos haciendo, pero también hay un grupo importante de personas que no lo están haciendo y contra eso están luchando los ediles”, expone Joel López Ortega, presidente de la Junta Ejecutiva Nacional de la Asociación de Municipios de México (AMMAC).

Es el caso, por ejemplo, de Tláhuac, en la Ciudad de México. A decir del alcalde Raymundo Martínez Vite, la mayoría de la población en la demarcación ha atendido las recomendaciones, pero hay quienes se resisten a hacerlo.

“Hay personas que no quieren entender la problemática que estamos padeciendo, como que no se les hace real. Hay personas en pueblos como Mixquic y San Juan que dicen que no está sucediendo nada, ese es el reto que ahora estamos enfrentando, informándoles, voceando en las calles para que entiendan que este problema es fuerte. Al momento de esta entrevista tenemos 20 personas confirmadas con Covid-19, tres fallecimientos”, expone.

SOLUCIONES

En la medida de sus atribuciones y sus posibilidades, los municipios han puesto en marcha todo un abanico de acciones y estrategias para solventar de manera eficaz la situación actual.

En Mazatlán, por ejemplo, el municipio convocó a reuniones con los organismos y cámaras empresariales con presencia en la demarcación para definir protocolos de actuación, de tal manera que el impacto en la actividad económica no fuera tan severo, refiere Luis Guillermo Benítez.

En Tláhuac, de acuerdo con Raymundo Martínez, se puso en marcha un plan para mejorar la distribución de agua mediante la contratación de pipas y se generan contenidos propios para informar, vía redes sociales, a los ciudadanos las disposiciones que es preciso atender.

Para contribuir a estas soluciones, la iniciativa privada cuenta con herramientas útiles, especialmente dispositivos tecnológicos que pueden contribuir a hacer más eficiente la comunicación entre gobiernos y ciudadanos.

Clear Channel, por ejemplo, cuenta con pantallas y soportes digitales de gran formato que permiten mostrar mensajes para seguir las medidas sanitarias ante una situación de crisis.

Ante la nueva realidad, estos dispositivos no solo sirven para hacer anuncios de publicidad, sino que su ubicación en áreas de gran afluencia permite dar un sentido social a su uso, ofreciendo a la ciudadanía información oportuna y en tiempo real.

 

 

Adán Larracilla Márquez

FOTO: ARCHIVO ALCALDES DE MÉXICO

 

 

 

 

 

Raymundo Martínez

FOTO: ARCHIVO ALCALDES DE MÉXICO