Tips de Gestión

Puntos clave para mejorar infraestructura peatonal

Los gobiernos estatales y municipales tienen entre sus prioridades la generación de obras de infraestructura que brinden condiciones de seguridad, confort y autonomía para la movilidad a pie

 

►Por David Galicia Sánchez
FOTO: DREAMSTIME

Caminar es la forma más elemental de movilidad. Todas las ciudades han implementado, en mayor o menor medida y con mayor o menor calidad y eficiencia, infraestructura enfocada en satisfacer las necesidades de las personas que se mueven a pie.

Según la Encuesta Origen-Destino elaborada en 2017 por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), todos los días se realizan más de cinco millones de viajes exclusivamente caminando tan solo en la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM).

Asimismo, la encuesta revela que 61.4 por ciento de los desplazamientos que se realizan a pie en la capital del país corresponde a mujeres, principalmente para actividades de cuidado, y que personas menores de 15 años representan 28 por ciento del total de trayectos peatonales en la ciudad.

Ante este panorama, los gobiernos estatales y municipales tienen entre sus prioridades la generación de obras de infraestructura que brinden las mejores condiciones para la movilidad a pie, lo cual exige de ambos una coordinación estrecha.

LA BANQUETA COMO PRIORIDAD
Carlos Romero Sánchez, Procurador de Desarrollo Urbano de Jalisco, sostiene que la principal obligación de los estados y municipios es la infraestructura peatonal.

“Porque cuando nos referimos a los peatones es a todas las personas, especialmente a las más vulnerables: adultos mayores, niños y adolescentes, así como personas con discapacidad, entonces la principal obligación del Estado es a una escala humana y esa se vive a nivel de calle. La banqueta, el espacio peatonal por excelencia, debería ser nuestro eje rector de las políticas públicas”, afirma en entrevista para Alcaldes de México.

Mantener las banquetas en buen estado favorece una movilidad ágil y segura para los peatones, al mismo tiempo que contribuye a mejorar el aspecto físico de las vialidades, especialmente si se complementa con sistemas eficientes de alumbrado, señalamientos y especificaciones de las superficies.

Carlos Romero apunta que el peatón debería seguir siendo, como lo fue, el actor principal a quien se le debería ponderar la infraestructura de las ciudades y no tendría que bajar cuando hay un arroyo vehicular, por lo tanto, las políticas públicas deberían centrarse en esa escala humana, la de las personas que se desplazan a pie.

Al respecto, refiere que hoy en día se cuenta con algunas herramientas que pueden contribuir a mejorar la infraestructura peatonal, como la NOM-SEDATU-001-2021, Espacios Públicos en los Asentamientos Humanos, emitida por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), así como el Manual de calles: diseño vial para ciudades mexicanas, elaborado por la Sedatu en colaboración con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). No obstante, el funcionario asegura que es preciso contar con una NOM de banquetas y hablar de banquetas completas, que no tengan pendientes inadecuadas para los usuarios.

“La banqueta no debería tener ningún desnivel transversal, debería tenerlo cuando hay pendientes, pero en el sentido longitudinal de la misma para hacer de ésta el eje principal”, apunta.

SEGURIDAD, CONFORT Y AUTONOMÍA
De acuerdo con un documento de investigación de la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía (CONUEE), para la creación de espacios y mejoras para la movilidad de los peatones, debe considerarse la ergonomía con la que los espacios se adapten al usuario mediante elementos que se ajustan a sus exigencias.

“Las tres características mínimas que debe tener la infraestructura peatonal son: seguridad, confort y autonomía”, apunta el documento.

En ese orden de ideas, la seguridad debe lograrse desde dos aspectos: que la infraestructura sea físicamente segura, y que el espacio por donde transitan los peatones sea conveniente en términos de sana convivencia generando confianza.

“Es recomendable que en condiciones extremas de clima deba garantizarse la movilidad; los pisos deben contener texturas que garanticen la adherencia e incluir drenajes de piso, de tal forma que no se produzca estancamiento del agua.”

El informe elaborado por la Dirección de Movilidad y Transporte de la CONUEE plantea que en todas las áreas que impliquen riesgo para la movilidad de los peatones es necesario implementar señalización vertical, por lo general, en la franja de andén abordador.

Asimismo, refiere que el espacio público se ha venido construyendo sin tomar en cuenta las necesidades de personas con discapacidad.

“La búsqueda de soluciones debe ser incluyente, independientemente de su edad, género y capacidad física, para que pueda utilizar los espacios públicos. Por lo tanto, se requiere de conocimientos sobre la población a la que va dirigida la infraestructura y adecuarla a las condiciones requeridas.”

También refiere que entre los criterios que hay que considerar al momento de realizar infraestructura peatonal, como aceras, vados, escaleras y pasos peatonales, está que las vías peatonales o aceras, como zonas longitudinales elevadas con respecto a la superficie de rodamiento, deben de proporcionar continuidad y evitar cambios de nivel con el uso de vados, escaleras y puentes, entre otros elementos.

Asimismo, sugiere tener en cuenta que en las aceras debe haber por lo menos tres franjas: la de acceso, la peatonal y el paramento, en función de las características de la zona a la que pertenezcan.

FOTO: DANIEL AUGUSTO_CUARTOSCURO