El uso de la firma electrónica permite a los tres órdenes de gobierno disminuir costos de operación hasta en 80% en papelería, insumos para impresión y almacenamiento
POR ALBERTO ALVAREZ SANTANA
FOTO ROSALÍA MORALES
El desarrollo del país tiene que pasar por el empleo de soluciones tecnológicas que hagan más fáciles los procesos a los ciudadanos. Un ejemplo es la firma electrónica, que ayuda a hacer más eficientes los trámites que los ciudadanos deben realizar, además de que facilita la comunicación entre funcionarios públicos, instituciones y ciudadanos.
Los inicios de este esfuerzo en México datan de 1996, con la Secretaría de la Función Pública (SFP), a través de Compranet y Tramitanet; la Secretaría de Economía (SE) con el Sistema de Información Registral y el Servicio de Administración Tributaria (SAT), dentro del marco jurídico mexicano de la ley de Firma Electrónica Avanzada, el Código de Comercio y Código Fiscal de la Federación, que reconocen a la firma electrónica avanzada como un medio válido y con los mismos efectos que una firma autógrafa.
La empresa mexicana SeguriData, especializada en soluciones de valor agregado para procesos electrónicos seguros usando la firma electrónica, fue la encargada de realizar con éxito la implementación de la tecnología que han empleado algunas de estas dependencias para incorporar a los funcionarios y ciudadanos al uso de la misma.
INFORMACIÓN EN BUENAS MANOS
Javier Alarcón Irigoyen, director General de esta compañía, comenta que existe un gran número de operaciones de la administración pública que se pueden realizar vía Internet, con lo que se obtienen grandes beneficios para los ciudadanos e importantes ahorros en la gestión gubernamental.
La generación de una firma electrónica se realiza a partir de la convergencia de tres elementos: un certificado electrónico, que contiene los datos de identidad de la persona; un archivo key que contiene una Llave Privada que es el instrumento de firma y una contraseña —en poder exclusivo del usuario— que protege a ésta y que habilita la operación. Una vez generada la firma, el archivo se sube a una nube digital y se realiza un proceso de autenticación para validar la identidad del firmante, así como la integridad y la autenticidad del documento electrónico.
El mercado de la firma electrónica se configura bajo un esquema denominado Infraestructura de Clave Pública (PKI, por sus siglas en inglés), un sistema que se basa en la existencia de terceros confiables, como por ejemplo los “prestadores de servicios de certificación” (PSC), quienes se encargan, entre otras cosas, de gestionar los certificados electrónicos de los titulares o signatarios y manejar la documentación que se genera mediante la firma electrónica.
En México, la SE es la responsable de acreditar a los PSC mediante un riguroso proceso. Javier Alarcón refiere que, actualmente, la empresa cuenta con la acreditación necesaria para tener documentos electrónicos con todas las evidencias necesarias para que sean legalmente válidos.
ESQUEMA EFICIENTE DESDE LA NUBE
SeguriData ofrece la solución bSigned Cloud, en un esquema denominado Software as a Service (SaaS). Se trata de aplicaciones de servicio alojadas en la nube, a las cuales se puede acceder por Internet a través de un navegador web estándar.
Lo anterior permite crear flujos de autorización de documentos electrónicos utilizando certificados digitales y firmas electrónicas por medio de correo electrónico y un navegador de Internet, así como aplicaciones para dispositivos móviles.
Esta solución permite hacer más eficientes los tiempos de gestión y reducir los costos relacionados con el consumo de papel sin contar con una gran infraestructura. Desde una computadora convencional que cuente con navegador y acceso a Internet, se pueden realizar las operaciones que requiere la institución, como la firma de oficios, órdenes de compra, contratos y minutas, entre otros.
En cuanto a la conservación de un archivo electrónico a largo plazo y la garantía de su integridad y autenticidad, SeguriData ofrece un servicio que permite almacenar los documentos firmados, de tal manera que siempre estén disponibles.
XALAPA Y EDOMEX, HACIA LA DIGITALIZACIÓN
Los tres órdenes de gobierno han mostrado interés en la aplicación de la firma electrónica debido a las ventajas que representa, como llevar trámites y servicios gubernamentales a sitios remotos del país con menores costos de operación, principalmente en papelería, insumos para impresión y almacenamiento de la información.
Cuando un gobierno se adapta a las nuevas herramientas que ofrece la tecnología, los beneficios se aprecian en la calidad de los servicios. El municipio de Xalapa, Veracruz, es un ejemplo destacado. “La eficiencia es un propósito que sólo se alcanza a partir de la innovación de los procesos tradicionales para la realización de un trámite o para el requerimiento de servicios administrativos que son propios de la gestión pública. En ese sentido, la aplicación de las nuevas tecnologías ha permitido la digitalización y ordenamiento de las operaciones que se realizan en las oficinas públicas”, explica Américo Zúñiga Martínez, presidente municipal de Xalapa.
El gobierno de la capital veracruzana ha empleado la firma electrónica en áreas estratégicas del ayuntamiento, como el Centro de Apertura Rápida de Empresas (CARE) a cargo de la Subdirección de Desarrollo Empresarial. Este esfuerzo se da en el marco de mejora regulatoria federal y estatal y ha permitido la disminución en los tiempos de conclusión de un trámite hasta en 95.8 por ciento.
De acuerdo con el edil, el municipio de Xalapa ha notado un impacto positivo en los costos de los procesos que gradualmente impactan en el presupuesto, ya que la firma electrónica también está pensada como un instrumento para disminuir gastos en insumos como papel, tintas, recursos para impresión y mensajería.
“Xalapa es un municipio consciente de las acciones que se demandan para la conservación del medioambiente y bajo este criterio hemos reducido el uso de papel y tintas en un 80 por ciento en las áreas del ayuntamiento que ya aplican la firma electrónica, incluso se reducen los gastos en gasolina e insumos para el traslado y entrega de expedientes que son propios de la mensajería interna”, comenta Américo Zúñiga.
Desde 2007, el gobierno del Estado de México, a través del Sistema Estatal de Informática y la Secretaría de Finanzas, poseen una plataforma de firma electrónica. Si bien, la mayoría de los procesos gestionados a través de esta herramienta son internos, paulatinamente se han integrado procesos de atención al ciudadano relacionados con Registro Público y Comercio.
La actual administración establece dentro de su Plan de Desarrollo 2011-2017, la implementación de un modelo de Gobierno Digital que permita a los funcionarios públicos consolidar los datos necesarios para brindar mejores servicios públicos, así como para poner a disposición de la ciudadanía una gama amplia de servicios a través de Internet.
SeguriData fue seleccionada por el gobierno de esta entidad para ofrecer una solución robusta, que cubra las necesidades de dicho modelo, mediante el cual se busca dotar de certificados digitales a todos los funcionarios del gobierno estatal y a todos los ciudadanos del Estado de México a través de la Autoridad Certificadora Estatal. El objetivo principal es automatizar todos los trámites disponibles en la Ventanilla Electrónica Única de Trámites y Servicios.
En una primera fase, se espera alcanzar más de 200 mil usuarios de la firma electrónica, entre funcionarios de la administración pública y ciudadanos.