Desde la Urna
El proceso electoral entra en una etapa de mucha actividad política y diciembre será el escenario de múltiples debates. Las precampañas están en marcha y, aunque los mensajes de las precandidaturas presidenciales deberían dirigirse exclusivamente a los militantes de sus partidos y coaliciones, la realidad es que estamos en un momento de posicionamiento político, especialmente en los casos donde solo hay un aspirante. En los estados está ocurriendo lo mismo. Después de una intensa lucha jurídica y política para aplicar la paridad de género en las candidaturas a las gubernaturas, prevaleció el criterio del Instituto Nacional Electoral (INE) y los partidos deberán proponer cinco mujeres y cuatro hombres en las nueve entidades. Por lo pronto, solo tenemos precandidaturas y no será sino hasta el registro de las candidaturas, cuando se revisará el cumplimiento de estas normas.
Diciembre también será un mes repleto de actividades para el INE y los Organismos Públicos Locales Electorales (OPLES) por todos los acuerdos que deberán tomarse para preparar la elección. Por principio, el INE deberá ajustar su presupuesto, dado el recorte de 5 mil millones de pesos (mdp) que aplicó la Cámara de Diputados. El tema no es menor, aunque 3 mil 500 mdp estaban destinados a una consulta popular que probablemente no se realizará. De cualquier manera, se trata del recorte más grande que se le ha hecho al INE en un año de elección presidencial. El INE llega a 2024, después de múltiples recortes y de un incremento paulatino de sus responsabilidades. Al respecto, la Consejera Presidenta afirmó que el recorte había sido “fuerte”, pero que el proceso electoral está a salvo. Sin embargo, la Consejera Carla Humphrey fue menos optimista y reconoce que se pone en aprietos al INE. El problema se ve más complicado cuando la Secretaría Ejecutiva (responsable del ejercicio presupuestal) y la Dirección de Administración del INE no tienen titular y están en manos de encargadas de despacho.
En todo caso, la calidad de la elección cuenta con el profesionalismo de los miembros del Servicio Profesional Electoral que, como siempre, estarán a la altura en los preparativos y desarrollo de la jornada electoral. El éxito dependerá de la dirección y coordinación adecuadas entre el Consejo General del INE y los equipos operativos del Instituto. Por ello, las características del ajuste presupuestal se vuelven muy importantes, si no se quiere afectar la elección.
Para los partidos políticos, diciembre será un mes de mucha actividad en los estados y municipios. Las batallas por definir las candidaturas al Congreso de la Unión, las diputaciones locales y las presidencias municipales están ya en puerta. Será un mes de intensas negociaciones y acuerdos políticos al interior de los partidos que, como en cada elección, generarán tensiones internas. Para empezar, los partidos deberán acordar, en sus coaliciones y alianzas, en qué espacios participarán juntos y en cuáles no. Después vendrá la batalla para la definición de cada candidatura. Sin duda, existen mecanismos políticos y estructuras partidistas para la toma de decisiones internas, pero eso no lo hace sencillo, sobre todo si se toma en cuenta que estarán en juego 20 mil 375 cargos de elección popular, desde regidurías en los ayuntamientos hasta la Presidencia de la República.
Finalmente, es evidente que las precampañas siguen generando quejas y denuncias de una coalición contra otra y que, tanto el INE como el Tribunal Electoral, tendrán un creciente trabajo para desahogar dichos procedimientos. De hecho, están pendientes, en la Sala Superior del Tribunal Electoral, una gran cantidad de procedimientos sobre actos anticipados de campaña y precampaña que se han acumulado a lo largo de todo el año.
En medio de todo, no cabe más que desearnos un feliz año 2024 electoral, pues el destino del país dependerá de nuestro voto.
Profesor Investigador de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Tecnológico de Monterrey. Twitter: @ArturoSanchezG Facebook: Arturo Sánchez Gutiérrez (figura pública)