Tips de Gestión

Tecnologías para la contención policial y rendición de cuentas

Los dispositivos eléctricos para el uso de policías ante situaciones de riesgo social pueden ser una alternativa para disminuir las lesiones e inclusive muertes por el uso excesivo de la fuerza en detenciones de civiles, además de ayudar a la transparencia en el ejercicio de la seguridad pública

 

►Por Isaías Ocampo
FOTO: DREAMSTIME

La falta de capacitación y el uso excesivo de la fuerza al momento de detener a sospechosos de algún delito ha acabado en varias ocasiones con la vida de civiles o en tratos crueles contra los detenidos.

De 2005 a 2020, se iniciaron 33 mil 750 expedientes contra policías, militares y marinos acusados de cometer homicidios, desapariciones forzadas, tortura, lesiones y abuso de autoridad, sin embargo, 99 de cada 100 carpetas de investigación han quedado en la impunidad, revela una investigación impulsada por el Programa Piloto de Apoyo al Periodismo de Investigación en México de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

El informe revela que, de las carpetas iniciadas, según datos de las fiscalías y poderes judiciales de las entidades, 278 fueron investigaciones por homicidio doloso contra policías y fuerzas federales, un promedio de 46 casos por año. Dichas carpetas de investigación se iniciaron contra 86 policías estatales, 73 policías municipales y 35 policías ministeriales, mientras que el resto fue contra elementos de seguridad federales.

 

DISMINUCIÓN DE MUERTES, LA META

Si bien en América Latina no existen los niveles de violencia entre policías y civiles, como los que ocurren en Estados Unidos donde mueren más de mil 600 civiles al año en manos de los elementos policiales, sí existen violaciones a los derechos humanos al momento de efectuar detenciones y el uso excesivo de la fuerza.

Ante ese panorama, Axon, empresa de tecnología de seguridad pública, se propuso coadyuvar en la disminución de las cifras de muertes por el uso de armas letales entre policías y civiles en más de 50 por ciento en los próximos años, mediante el uso de dispositivos más eficaces, seguros y confiables que un arma de fuego o un tolete, que además permiten una mejor rendición de cuentas.

 

“Por ejemplo, al implementar el uso de taser en Brasil, en el primer año hubo una reducción de más de 50 por ciento de muertes de civiles ante policías, y cuando se añadieron cámaras, a finales de 2021, en los primeros seis meses la reducción de muertes fue de 80 por ciento”, refiere en entrevista Alexander Polit, Director Regional de Axon para América Latina y el Caribe.

El especialista asegura que en América Latina la meta ya se está cumpliendo y aunque en países como Chile, Colombia o México la situación no es tan grave como en Brasil o Estados Unidos, el exceso de fuerza es común cuando los policías utilizan sus toletes, no para someter al presunto delincuente, sino para golpearlo hasta que se rinda.

“Sucede que el bastón expandible fue diseñado para dos cosas: bloquear y hacer
maniobras para controlar a un sujeto, pero en la práctica ocurre que los policías empiezan a pegar lo más fuerte que pueden, y además el policía lo hace enojado porque seguramente lo agredieron y pierde el control, mientras que por esos hechos no hay rendición de cuentas”, opina el directivo de Axon.

USO DE TASER EN LA SEGURIDAD PÚBLICA

En México, el uso de dispositivos como inmovilizadores eléctricos o tasers por parte de las corporaciones policiacas se realiza a nivel estatal en Sinaloa y en los municipios de Puebla y Monterrey. Según datos de Axon, en 2022 el uso del taser salvó a más de 275 mil personas de la muerte o lesiones corporales graves durante las intervenciones policiales, detalla Alexander Polit.

Los beneficios del uso de este tipo de dispositivos van acompañados de mecanismos para la rendición de cuentas, porque los dispositivos registran cada vez que se prenden o hacen algún disparo; además, la pistola va interpretando cuando existe resistencia para incrementar la energía y mantener a la persona bajo control o si hay poca resistencia disminuir la cantidad de descarga, además de garantizar que el policía, por descuido o a propósito, no abuse de su uso porque se detiene a los cinco segundos aun cuando se mantenga apretado el gatillo.

El experto de Axon refiere que inclusive Amnistía Internacional recomienda el uso del taser, especialmente en situaciones donde hay gente violenta o agresiva.

CAPACITACIÓN TECNOLÓGICA

Con el fin de mantener el uso correcto de estos dispositivos, Alexander Polit asegura que las corporaciones policiacas pueden acceder a capacitaciones encabezadas por entrenadores provenientes de Estados Unidos, Brasil, México y Puerto Rico, quienes entrenan a las agencias en el uso del arma para que los mismos policías locales repliquen ese entrenamiento dentro de las corporaciones.

Dicha capacitación va más allá de saber disparar el artefacto, precisa el especialista, porque el entrenamiento se realiza con trajes especiales que permiten una simulación más apegada a la vida real, además de sistemas de realidad virtual donde se realizan diversos simulacros de tiro o empatía.

“La empatía es bastante importante cuando hablamos de policía ante la ciudadanía, porque no todo es blanco y negro, de buenos contra malos, hay temas de violencia doméstica, feminicidio, menores de edad siendo violentados o agredidos y temas de desórdenes mentales, como personas con autismo que no reaccionan como una persona común, por ello el entrenamiento de empatía para saber cómo lidiar con esas personas”, comenta el entrevistado.

El uso del taser se complementa con videocámaras y dispositivos inteligentes que se comunican entre sí cuando el policía desenfunda el arma o activa el dispositivo, lo que puede conectarse con los Centros de Comando para brindar apoyo al personal de campo o dar seguimiento remoto a cualquier situación de riesgo.