Expediente Abierto
►Centros de Vigilancia ♦ Opinión
El patrullaje al azar no es una forma eficaz de combatir los problemas de seguridad, sin embargo, es la estrategia más comúnmente utilizada, esto significa que mucho del trabajo y recursos públicos destinados para la labor policiaca no logran cumplir con el valor requerido para combatir la delincuencia.
Los ciudadanos, por su parte, esperan una reacción inmediata cuando sufren de algún tipo de delito, sin embargo, los policías muchas veces no logran realizar el arresto, y cuando lo hacen, no cuentan con las capacidades para probar que los aprehendidos son culpables, aun contando con arduas labores de inteligencia, como en el caso de capturas de grandes líderes del narcotráfico. Por lo tanto, es necesario que las políticas públicas en materia de seguridad sean rediseñadas a nivel nacional, desde una óptica diferente.
Pero ¿por qué el diseño de políticas públicas en materia de seguridad debe ser diferente? Esto tiene que ver con la forma en la que se interviene y el contexto en que se aplica. Las políticas públicas en materia de seguridad son acciones que generan una gran cantidad de reacciones sociales, por ejemplo, si el gobierno construye un hospital y está bien hecho o cumple con su objetivo social, no presentará ningún tipo de objeciones, sin embargo, si la Policía hace uso de la fuerza, entonces las reacciones sociales pueden ser negativas; es por eso que la violencia como causal del crimen y el equilibrio que implica la intervención o no del Estado para prevenir y contener la violencia son dos características a considerar antes de diseñar políticas públicas en materia de seguridad.
Herman Goldstein originó el concepto de políticas delictivas orientadas a la solución de problemas. Su idea era simple: planteaba que las políticas deberían centrarse en cambiar las condiciones que dan lugar a las causas de la delincuencia, y no simplemente en responder a los llamados cuando los delitos ocurren o anticipándolos a través del patrullaje preventivo. La Policía debe adoptar un acercamiento basado en la solución de problemas, en el que se trabaje a través de la siguiente BASE: Búsqueda, Análisis, Solución y Evaluación.
1. Búsqueda y examen de los datos para identificar patrones en los incidentes enfrentados rutinariamente.
2. Análisis en profundidad de estos patrones (problemas identificados) en relación con sus causas.
3. Solución mediante la búsqueda de nuevas formas de intervención temprana en la cadena causal, de tal forma que estos problemas tengan menos probabilidad de ocurrencia en un futuro.
4. Evaluación del impacto de las políticas diseñadas y, si tales no han funcionado, empezar todo el proceso otra vez.
Estas nuevas estrategias no deben limitarse solo a la identificación, arresto y sentencia de los delincuentes, sino también a buscar soluciones a partir de las causas que están originando los delitos.