Impulsar viviendas sostenibles y asequibles, un nuevo reto municipal

►Por Olivia Ortiz Mejía
FOTO: DREAMSTIME

De acuerdo con el Programa de Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (ONU-Habitat), el derecho humano a una vivienda digna y adecuada consiste en garantizar que todas las personas tengan la posibilidad de vivir en condiciones de seguridad, paz y dignidad en alguna parte, lo que implica más que cuatro paredes y un techo.

Un factor que imposibilita la accesibilidad a una vivienda digna en México es el sector de servicios financieros. Las formas más comunes para adquirir una casa son mediante un crédito hipotecario o la herencia de familiares o amigos, sin embargo, muchos de los habitantes no son candidatos a este tipo de productos financieros, ya sea mediante los sistemas contributivos como el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) o el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), o de alguna otra institución financiera.

Esto genera una problemática de doble partida: por un lado, la mayor parte de los mexicanos no puede acceder a créditos por ingresos bajos y, por otro, más de la mitad de la población trabaja en la economía informal, lo que los excluye de las instituciones de seguridad social que les permitan acceder a créditos para adquirir una vivienda.

APOYOS DE VIVIENDA

En un comunicado de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), que dirige Román Meyer Falcón, reporta que en esta administración ha logrado disminuir el rezago habitacional en 2.9 millones de personas, a través de la Política Nacional de Vivienda.

Destaca que, mediante la estrategia de autoproducción, se han realizado un millón 367 mil 876 acciones con una inversión de 91 mil 335 millones de pesos (mdp), de las cuales, 52.8 por ciento se encuentra en los 10 estados que registran mayor rezago. Asimismo, la colocación de créditos y subsidios asciende a más de tres millones de acciones con 1.3 billones de pesos, con ello se ha beneficiado a más de 11 millones de personas en esta administración.

En tanto, la Subsecretaria de Ordenamiento Territorial y Agrario, Edna Elena Vega Rangel, detalló que la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi), desde 2019 a la fecha, ha entregado 384 mil 247 apoyos de vivienda, con una inversión de 31 mil 419 mdp, para beneficiar a un millón 500 mil personas de las 32 entidades del país. Estas acciones se han realizado a través del Programa Por Una Mejor Vivienda (PMV), el Programa Nacional de Reconstrucción (PNR) y el Programa de Vivienda Social (PVS).

“Para 2024 se realizarán 76 mil 765 acciones con 4 mil 437 mdp, estos apoyos se darán en 235 municipios de 32 estados, mediante el PMV y PVS”, señala la Subsecretaria Vega Rangel.

Ahora bien, en lo que compete a los municipios, entre sus atribuciones se encuentran: autorizar, controlar, vigilar el ordenamiento territorial y la planeación del desarrollo urbano sustentable, promover la elaboración de programas, estrategias y acciones sectoriales, y establecer la reglamentación en materia de construcción, entre otras.

HABITABILIDAD URBANA Y SUSTENTABILIDAD

En Mérida, con una población de un millón de habitantes, una extensión territorial de 86 mil hectáreas y 371 mil viviendas, los reportes señalan que más de un 90 por ciento de estas se encuentra en condiciones materiales aceptables y cuenta con servicios básicos, sin embargo, aún es necesario garantizar que todas las personas alcancen un mejor nivel de calidad de vida, refiere el estudio Panorama de la Vivienda en Mérida, elaborado por la Coordinación de Vivienda y Regeneración Urbana del Instituto Municipal de Planeación de Mérida (IMPLAN-Mérida).

En el ámbito de su competencia, el ayuntamiento de Mérida ha orientado los instrumentos de planeación del desarrollo municipal para que los meridanos tengan casas firmes, seguras, confortables, funcionales, sustentables, asequibles, accesibles, servidas, ubicadas y adecuadas.

Para el gobierno municipal los retos son la reducción de la huella inmobiliaria con modelos de construcción sostenibles que sean generadores y reguladores de los procesos de ocupación del suelo, áreas verdes y recursos naturales para aminorar el impacto negativo que conlleva el crecimiento y expansión de la ciudad desde lo social, económico y ecológico.

Mientras que su estrategia, destaca el documento, es disminuir los impactos ecológicos, industria inmobiliaria y fortalecer los mecanismos de sustentabilidad en la planeación, construcción, mejoramiento o ampliación de vivienda.

Las acciones, refiere, son la implementación de incentivos de construcciones sostenibles en los nuevos desarrollos y edificaciones verticales, así como potenciar la valoración de impactos ambientales y sociales en el análisis costo-beneficio para la planeación y ordenación del territorio.

HOGARES ASEQUIBLES EN GUADALAJARA

Con el objetivo de generar vivienda social y repoblar Guadalajara, el ayuntamiento puso en operación un programa donde cinco predios municipales serán entregados a desarrolladores inmobiliarios y 40 por ciento de estas torres de departamentos será destinado a vivienda, cuyos costos oscilarán entre los 500 y 900 mil pesos.

Serán en total 504 viviendas en estos cinco terrenos y en su venta se dará preferencia, en una primera etapa, a trabajadores del municipio pertenecientes a áreas como seguridad pública, bomberos y servicios públicos, entre otros.

Este modelo de gestión de vivienda es impulsado por organismos internacionales y es un modelo sustentable donde ganan tanto los constructores como el municipio.