Ante el reciente crecimiento desmedido en San Miguel de Allende en los últimos años, la actual administración municipal, que encabeza el alcalde Mauricio Trejo Pureco, sigue mejorando el desarrollo de esta ciudad Patrimonio de la Humanidad con una planeación a favor de la conservación de su esencia patrimonial.

Al respecto, el Presidente Municipal señala que, específicamente en el desarrollo a través de la conservación, su administración municipal ha establecido una política pública que consiste en contener la presión inmobiliaria que en los últimos años prevalece en el municipio, representada por fraccionamientos y desarrollos en condominios horizontales y verticales, ubicados de forma dispersa en el territorio y que van destinados a la edificación de vivienda de interés medio, alto y residencial, así como la del mercado de casas de fin de semana, que propician varios efectos significativos, por ejemplo, el consumo de agua de uso urbano, así como la irrupción de fenómenos de gentrificación en la ciudad, entre otros.

“En este sentido, el actual Instituto Municipal de Planeación, Innovación y Supervisión del Plan 2040 (Impis) ha sido un artífice primordial en la revisión minuciosa de cada proyecto que pretende construirse en el municipio”, refiere.

Mediante distintos dictámenes, con el Programa Municipal de Desarrollo Urbano y de Ordenamiento Ecológico Territorial (PMDUOET) y con toda la normatividad aplicable, actualmente se coordina una comisión técnica integrada por todas las dependencias y entidades de la administración pública municipal, involucradas en la autorización de los permisos de uso de suelo.

El acalde menciona que los proyectos son revisados en conjunto, lo que permite que cada dependencia emita las restricciones físicas y normativas que inciden, de forma específica, en el diseño urbano y arquitectónico de las obras; con ello y junto con los desarrolladores, se encuentran las soluciones óptimas para mitigar y compensar los impactos generados, como son los ambientales, viales, de riesgos, urbanos, sociales y económicos.

Se trata de una buena práctica que, incluso, proporciona certidumbre jurídica y técnica para los desarrolladores e inversionistas al pretender edificar en el municipio, señalan las autoridades.

“San Miguel de Allende está mejor cada día. Con planeación para el desarrollo urbano ordenado, mantendremos el nombramiento de Ciudad Patrimonio de la Humanidad y trabajaremos para seguir consolidándonos como la Mejor Ciudad Pequeña del Mundo, la Mejor Ciudad Patrimonio del país, y el Embajador de Guanajuato en México”.

 

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