Recuperar el pulmón del DF, esencial

por | Feb 1, 2015 | Ecosustentable, Febrero 2015, Febrero 2015 | 0 Comentarios

En Xochimilco, las chinampas utilizan lodo como fertilizante natural y evitan la contaminación del agua; durante mucho tiempo fueron abandonadas debido a la migración laboral y al desinterés de autoridades, entre otras causas

Xochimilco

Por diferentes causas, la zona chinampera de Xochimilco ha tenido pérdidas importantes de territorio y de chinampas, sobre todo porque los habitantes prefirieron salir a trabajar a otros lugares antes que continuar con actividades agrícolas, además del poco interés de las autoridades por el mantenimiento de los canales y la plaga del lirio acuático, así como la contaminación del agua por falta de un sistema de drenaje.

Esta zona se conforma de 90 hectáreas que albergan 540 chinampas para la producción de hortalizas y que son herencia de culturas prehispánicas que utilizaban este mismo método de cultivo.

Como se sabe, las chinampas son pequeños islotes donde se utiliza el lodo que se encuentra en el fondo de los canales como fertilizante natural, éste se complementa con abonos orgánicos para garantizar el crecimiento de las cosechas y evitar la contaminación en la zona, sin usar agroquímicos. Este espacio rural, considerado el pulmón de la Ciudad de México, es mejor conocido por su atractivo turístico con paseos por los canales en embarcaciones de madera multicolores.

DIAGNÓSTICO

Alberto González Pozo, catedrático de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y coordinador del libro Las chinampas de Xochimilco, al despuntar el siglo XXI: inicio de catalogación, advierte que tras cinco años de investigación realizada en el sitio, se concluyó que los factores que influyen en la desaparición de la zona chinampera de Xochimilco y Tláhuac son: el hundimiento del suelo, la extracción desmedida de agua y la invasión de hormigas en viviendas.

Rosalba del Valle

Rosalba del Valle

0Encontramos que hay 30 por ciento de canales que son navegables y otro 30 por ciento de canales que ya son invadidos por la plaga del lirio, mientras el resto ya no tiene agua o la que tiene cuenta con niveles muy bajos y no se puede navegar por ahí”, señala

El estudio coordinado por González Pozo abarca a 544 chinampas de las cerca de 10 mil estimadas en la zona de Xochimilco, San Gregorio, San Luis Tlaxialtemalco, Tláhuac y Mixquic, principalmente.

La contaminación, la proliferación de plagas y el comercio informal han afectado a las chinampas y a los productores locales, que dependen en gran medida de esta técnica de cultivo.

AL RESCATE DE LAS CHINAMPAS

Las cooperativas organizadas realizan labores de conservación y difusión de temas ecológicos para mantener en estado original las chinampas y canales que todavía son navegables. Un ejemplo es la cooperativa Olintlalli, que tiene el propósito de implementar un proyecto de conservación en la zona lacustre de Xochimilco, mediante la promoción de prácticas sustentables, así como de conservación y respeto al medioambiente.

Rosalba del Valle, bióloga de la Universidad Nacional Autó- noma de México (UNAM) y miembro de la cooperativa, comenta que “el trabajo que se realiza busca continuar con el cultivo de hortalizas de manera tradicional, con fertilizantes naturales que le dan a las plantas una alta resistencia a las plagas, lo que también nos evita el uso de insecticidas”

La cooperativa Olintlalli ha conseguido desarrollar un proyecto integral que lleva al visitante a conocer diversos aspectos del trabajo en las chinampas; en sus instalaciones cuentan con un espacio demostrativo para ilustrar el cultivo con el método tradicional, espacio para campamento, una palapa que se puede usar para visitas escolares, un ajolotario dedicado a la conservación de esta especie y un espacio de pesca recreativa.

Morco Polo Tellez

Marco Polo Téllez

Marco Polo Téllez, abogado y también integrante de la cooperativa, explica que a Olintlalli sólo se puede llegar por trajinera, por lo que quienes tengan la intención de ir de campamento deberán llevar todo lo necesario para esta actividad.

“Nos interesa mantener la forma de producción tradicional, sin embargo, debemos incluir otro tipo de actividades para que sea más atractivo a los visitantes y que toda la familia se divierta, aprenda de la vida en las chinampas y desarrolle interés por la protección del medioambiente”, apunta.

on anticipación en grupos de 15 personas. “También buscamos espacios para comercializar nuestros productos que son de muy buena calidad pero, en ocasiones, no podemos competir con los precios que se ofrecen en la Central de Abasto de la ciudad, por eso acudimos a ferias y exposiciones de productos artesanales”, enfatiza Rosalba del Valle.

Alberto Alvarez Santana

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *