El desempeño de la producción nacional de ganado bovino va en aumento, y actualmente no hay una región en México que no participe de este sector. Durante 2010, el país recibió 284 mil 466 toneladas de carne y exportó 70 mil 147 toneladas, la mayor venta al exterior en la última década, según datos de la Asociación de Engordadores de Ganado Bovino del Noroeste (AEGBN).
En 2009, las exportaciones significaron 55 millones de dólares (mdd), en 2010 poco más de 79 mdd y para 2011 se estima que la cifra rondará los 105 mdd, indica el organismo.
Suman más de 30 millones de cabezas, en 18 meses llegan a pesar hasta 400 kilos y se ubican en alrededor de 114 millones de hectáreas en el territorio nacional; es decir, por todos los municipios del país. La producción nacional de ganado bovino para carne implica desde los recursos naturales, pasando por engorda, hasta las empresas procesadoras de alta tecnología que exportan a Asia y Estados Unidos (EU) y, aunque cada vez menos, importan de otros países, sobre todo de EU y Canadá.
La mayor cantidad de ganado se produce en las zonas tropicales del país, con tamaños promedio de hato (conjunto de cabezas de ganado) muy pequeños. “Aunque es muy difícil hablar de promedios en México, sí se puede decir que 90 por ciento de los hatos son de menos de 50 vacas y el tamaño de hato promedio es de unos 17 animales por productor del país”, explica Everardo González Padilla, director general de Ganadería de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa).
CÓMO ESTÁ EL MERCADO
El investigador de la Universidad Autónoma Agraria “Antonio Narro” (Saltillo, Coahuila), Miguel Mellado, coincide en que la producción de ganado bovino para carne se desarrolla bajo diferentes contextos agroclimáticos y tecnológicos en México. Las regiones árida y semiárida representan 33 por ciento de la producción de carne a nivel nacional, la región templada 31.6 por ciento y la región trópico húmedo y seco es la que más aporta con 35.4 por ciento, agrega el experto.
Tradicionalmente, dice Everardo González, las engordas intensivas estaban en el norte de México, donde destacaban Nuevo León, la región Lagunera y Sonora. Ahora se sumaron Sinaloa y la zona occidente de Guadalajara, y cobran importancia creciente Querétaro, Aguascalientes y Baja California.
“Cuando hablamos de quién produce más carne, hablamos de toda una cadena. Entonces ¿quién produce la carne?, el país, donde tienen mayor participación los municipios”, asienta el funcionario de la Sagarpa.
De la sequía que afecta al territorio mexicano, las autoridades de la Sagarpa han comenzado a tomar medidas preventivas en las entidades del norte del país, porque si en los siguientes dos meses no llueve la situación podría volverse preocupante. Por ahora, la alerta se ubica en 20 municipios del estado de Zacatecas por la sequía “atípica” que se presenta.
VAN POR ASIÁTICOS
De carne de porcino, el país produce 1 millón 250 mil toneladas e importa medio millón de ellas. No obstante, en el periodo 2008- 2009 registró un “tropiezo”, pero en 2010 se recuperó y rebasó las cifras previas a la crisis.
El gran mercado que tiene la producción mexicana de cerdo es Asia. En 2010 se exportaron 60 mil toneladas a ese continente, y actualmente se está en negociaciones con China. Hoy en día, ya se exporta a Corea, Japón y Rusia.
En 2010 regiones de los estados de Aguascalientes, Campeche y Zacatecas recibieron el reconocimiento internacional para la exportación de ganado bovino. Esto permitirá incrementar las exportaciones de reses hasta en 35 mil cabezas por ciclo, y generará ingresos adicionales por 16.2 mdd en 2011, con respecto a los 482 mdd alcanzados el año anterior.
Autoridades estadounidenses, a través del Departamento de Agricultura (USDA por sus siglas en inglés) reconocen a seis entidades nacionales para la exportación de ganado bovino: Colima, Quintana Roo, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas y Yucatán. Asimismo consideran a 22 regiones de 18 estados.
El funcionario de la Sagarpa puntualiza que si el país quiere producir más carne, será necesario producir más becerros en el mediano y largo plazos y, al mismo tiempo, mantener el abasto nacional.
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