Por Isaías Ocampo

En México, el 78.9% de la población considera que vivir en su entidad federativa es inseguro; el 70.5% se siente inseguro en su municipio y el 50.6% en su colonia, según la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2019, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Las cifras anteriores corresponden al periodo marzo-abril de 2019, en un contexto donde el 67.2% de la población de 18 años y más considera que la inseguridad es el mayor problema del país, seguido del desempleo (32.8%) y el aumento de los precios (28.1%).

El Inegi detalla además que son las mujeres las que siguen sintiendo mayor inseguridad, pues el 82% la percibe en su estado; 74.1% en su municipio y el 54.5% en su colonia; contra el 75.4%, 66.3% y 46.2% de los hombres, respectivamente.

Las estadísticas de la ENVIPE contemplan delitos que afectan de manera directa a las víctimas o a los hogares, tales como: robo total de vehículo, robo parcial de vehículo, robo en casa habitación, robo o asalto en calle o transporte público, robo en forma distinta a las anteriores (como carterismo, allanamientos, abigeato y otros tipos de robo), fraude, extorsión, amenazas verbales, lesiones y otros delitos distintos a los anteriores (como secuestros, delitos sexuales y otros delitos).

Víctimas y delitos en cada entidad

Durante 2018 hubo 28,269 víctimas de delitos por cada 100,000 habitantes, una disminución de apenas 5.0% respecto a 2017.

La Ciudad de México y el Estado de México son las entidades con mayor tasa de víctimas por cada 100,000 habitantes, con 42,603 y 41,389, respectivamente. En el caso de la capital mexicana no hubo una diferencia significativa con respecto al nivel de delitos del año anterior, pero en el Estado de México hubo una disminución de 11.4% respecto a 2017.

Donde menor reporte de víctimas hubo, por cada 100,000 habitantes, fue en Chiapas (15,958), Veracruz (16,001) y Oaxaca (17,757).

En 2018, detalla la ENVIPE, hubo 9 entidades que presentaron una baja en la tasa de víctimas de delitos; 2 presentaron alzas y 21 no presentaron cambios significativos.

Guerrero fue la entidad que reportó mayor baja en las estadísticas de víctimas con -17.8%, mientras que la mayor alza se registró en Hidalgo.

En cuanto a la incidencia delictiva, la tasa se ubica en 37,807 delitos por cada 100,000 habitantes; una baja de -4.0% respecto a 2017. La mayor tasa de este tipo la registró la Ciudad de México, con 69,716 delitos por cada 100,000 habitantes; la menor tasa de delitos ocurrió en Chiapas, con 19,409 por cada 100,000 habitantes.

Percepción de inseguridad por entidad

Los habitantes de Tabasco son quienes mayor inseguridad perciben en su entidad, pues el 90.2% lo considera así. Le siguen la Ciudad de México (89.2%), el Estado de México (88.8%), Guanajuato (88.8%), Morelos (88.5%), Puebla (87.7%) y Veracruz (87.6%).

En contraste, son Yucatán (38.5%), Baja California Sur (48.2%) y Aguascalientes (56.4%), las que menor percepción de inseguridad reflejan.

La ENVIPE estima que sólo el 10.6% del total de delitos es denunciado, mientras que del total de denuncias se inicia Averiguación Previa o Carpeta de Investigación en el 63.9% de los casos.

En 2018, señala el estudio, se inició averiguación previa tan sólo el 6.8% del total de delitos, lo que significa que el 93.2% de ellos no se denuncia o no se abre alguna investigación, estima el Inegi.

Entre las razones por las que las víctimas no denuncian los delitos está la pérdida de tiempo, opina el 31.7% de los encuestados en la ENVIPE, aunque el 63.2% de las causas son atribuibles a la autoridad; entre ellas se encuentran, además, la desconfianza en la autoridad (17.4%), trámites largos y difíciles (8.9%), actitud hostil de la autoridad (4.3%), y miedo a ser extorsionados (0.8%).

Los lugares donde mayor inseguridad siente la población son en el cajero automático en la vía pública, en el banco, el transporte público, la calle, la carretera, el mercado y en centros recreativos o parques.

Por otra parte, son la Marina, el Ejército y la Policía Federal las autoridades en las que más confían los ciudadanos, mientras que los jueces, la policía municipal y la de tránsito son las que menor confianza generan entre la población.