Expediente Abierto

►Seguridad Pública

Invertir en profesionalización, clave para mejorar la seguridad

 

La fortaleza de las Policías municipales radica en buenos salarios, prestaciones y capacitación, advierten especialistas

 

►Por Martha Palma Montes
FOTO: CRISANTA ESPINOSA AGUILAR /CUARTOSCURO

Los municipios destinan recursos principalmente en equipar y uniformar a los elementos de seguridad, sin embargo, para lograr instituciones sólidas es necesario asignar un mayor presupuesto en salarios, prestaciones, desarrollo de habilidades y certificaciones, coinciden expertos en la materia.

EN QUÉ SE INVIERTE
Durante 2020, a nivel nacional, el presupuesto ejercido por las instituciones encargadas de la función de seguridad pública municipal fue de 60 mil 73 millones 66 mil 365 pesos. Esta cantidad representó un aumento de 6.5 por ciento, comparado con la cifra ejercida en 2019.

En el Estado de México se concentró la mayor cantidad del presupuesto, con 13.9 por ciento, lo anterior con base en el Censo Nacional de Gobiernos Municipales y Demarcaciones Territoriales de la Ciudad de México 2021, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Los municipios que más asignaron presupuesto a las instituciones de seguridad pública fueron Tijuana, Baja California; León, Guanajuato; Guadalajara, Jalisco; Juárez, Chihuahua; Monterrey, Nuevo León, y Toluca, Estado de México, con un promedio de 1000 millones de pesos.

Dicho censo refiere que el principal equipamiento o instrumento para el uso de la fuerza otorgado y/o asignado al personal de las corporaciones policiales municipales fueron esposas o candados de mano y equipo de radiocomunicación. Los elementos de uniforme mayormente entregados fueron: pantalón, botas y gorra.

Asimismo, al cierre de 2020, las instituciones de seguridad pública municipal contaron con 189 mil 498 servidores públicos, del total, 78.6 por ciento fueron hombres y 21.4 por ciento mujeres. En contraste con 2018, el total de personal aumentó 7.8 por ciento en 2020. De acuerdo con el tipo de organización policial, 140 mil 882 elementos pertenecían a la Policía preventiva, cifra que, en contraste con 2018, registró un aumento de 9.4 por ciento.

Respecto al rango de ingresos mensuales del personal de seguridad pública municipal, 31.7 por ciento percibía entre 10 mil y 15 mil pesos, rango que, comparado con lo reportado en 2018, aumentó 31.5 por ciento, en 2020. Según la escolaridad del personal, 54.1 por ciento contaba con estudios de preparatoria.

En cuanto a las prestaciones laborales recibidas durante 2020 por el personal adscrito a las instituciones de seguridad pública municipal, las más frecuentes fueron: aguinaldo, vacaciones y prima vacacional. En cambio, las prestaciones que recibió el personal con menor frecuencia fueron: créditos automotrices, ahorro solidario y becas escolares para sus hijos.

CÓMO HACER LOS RECURSOS MÁS EFICIENTES
Para fortalecer la seguridad pública, los ayuntamientos requieren analizar las necesidades del territorio y, posteriormente, reforzar las competencias de los elementos y generar proyectos o estrategias sostenibles a largo plazo, opina Francisco Rivas, Director General del Observatorio Nacional Ciudadano.

“Es necesario invertir más en las habilidades de los servidores públicos encargados de la seguridad, porque de nada sirve contar con nuevas tecnologías, si no hay capacidad de detectar y atender las causas que generan la inseguridad. Siempre hay que priorizar la profesionalización y formación de los cuerpos policiacos.”

Los municipios que más impuestos locales recaudan son los que más invierten en su Policía, como San Pedro Garza García, Monterrey, Zapopan, Guadalajara, Querétaro y Puebla.

De ahí la importancia de aumentar la recaudación y no depender de los fondos federales, cuyos recursos han disminuido significativamente en los últimos 10 años, advierte Miguel Garza Flores, Director Ejecutivo del Instituto para la Seguridad y la Democracia A.C. (INSYDE).

“Los municipios con instituciones de seguridad robustas destinan casi 30 por ciento de su presupuesto total; entiendo que para los alcaldes es complicado manejar los recursos, pero sin invertir en la Policía, difícilmente se podrá fortalecer.”

RUBROS PRIORITARIOS
Lo primero en lo que deben contribuir los presidentes municipales es en condiciones laborales dignas, mejores salarios y prestaciones hacia los elementos de seguridad, considera Garza Flores.

“Es muy grave que los policías trabajen 24 horas y ganen menos que en cualquier otra profesión, necesitan jornadas equitativas, tener acceso a créditos de vivienda y servicios de salud, si hay inversión en estos rubros, la rotación de personal disminuye y más personas atienden las convocatorias de ingreso.”

Resalta las buenas prácticas del ayuntamiento de Solidaridad, donde los policías reciben comida caliente, servicio de sastrería y dentista; mientras que en San Pedro Gaza García se pagan las horas extra. Asimismo, las corporaciones de Chihuahua, Puebla, Guadalupe y Monterrey cuentan con apoyo terapéutico en los rubros de adicciones, violencia familiar, maltrato infantil y depresión.

El especialista también recomienda invertir en aplicar metodologías como el Programa de Certificación Policial Ciudadana (CERTIPOL), a fin de desarrollar estándares profesionales en las áreas de reclutamiento y selección, operación policial, prevención del delito y fortalecimiento institucional.

Lilian Chapa Koloffon, analista de políticas en seguridad pública, coincide en otorgar salarios base que procuren una vida digna a los policías municipales y hacer un cálculo del estado de fuerza que requiere el territorio.

“Con base en las características de los polígonos, si son comerciales, habitacionales o semiurbanos, es como debe asignarse el número de elementos y tipo de vehículos. Sin embargo, siempre debe ser prioritario formar capacidades y tener personal certificado.”