Las entidades federativas donde se pagan más sobornos son el Distrito Federal, el Estado de México, Guerrero, Oaxaca, Hidalgo y Tabasco, según se desprende del estudio Índice Nacional de Corrupción y Buen Gobierno, elaborado por Transparencia Mexicana.
En el documento, con datos correspondientes al 2010, se advierte que —comúnmente— los ciudadanos incurren en prácticas de corrupción en situaciones como recibir infracciones de tránsito, pasar artículos por las aduanas, evitar ser detenido por el Ministerio Público o bien al presentar una denuncia, trabajar en la vía pública, solicitar la recolección de la basura y por obtener agua de las pipas municipales.
Se calcula que los mexicanos destinan 165 pesos de su ingreso para el pago de “mordidas”.
El estudio refiere que en 2010, se identificaron 200 millones de actos de corrupción en el uso de servicios públicos provistos por autoridades federales, estatales, municipales, así como de concesiones y servicios administrados por particulares. Lo anterior implica un agravamiento en la corrupción, ya que en 2007 se reportaron 197 millones de actos.
Transparencia Mexicana hizo ver que la costumbre de las “mordidas” se explica en parte por las excesivas regulaciones para concluir los trámites, a los bajos salarios de los servidores públicos y a la falta de controles en las oficinas de gobierno.
Pero no todo es negativo, otras entidades federativas han mejorado en materia de transparencia, como son Baja California Sur, Yucatán, Durango y Morelos, que reportaron un índice menor al promedio nacional que, en la fecha de referencia, fue de 10.3 puntos.
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