Rafael Luis Cabrera, alcalde de Santa María del Tule, y padres de familia exigen al entrenador de los niños triquis, campeones del Mundial de Mini-Baloncesto en Argentina, que firme un reglamento para poder usar la cancha construida para sus entrenamientos.
El alcalde del municipio donde se encuentra la cancha, y el comité de padres piden al entrenador de los niños Sergio Zúñiga que se comprometa a pagar cuotas, comprar balones, material deportivo y computadoras, informó el diario Reforma.
El entrenador afirmó que autoridades municipales y el comité de padres de familia de la escuela Vicente Guerrero impide la entrada del equipo desde el pasado 15 de julio.
“De plano quitaron el candado y pusieron otro para no dejarnos pasar. Ese día estaban los niños entrenando, los sacaron y les dijeron que no podían estar ahí”, denunció.
Zúñiga encabeza la Academia de Baloncesto Indígena de México (ABIM) que atiende a 30 niños de distintas comunidades oaxaqueñas y es el responsable del equipo que ha alcanzado fama mundial.
El año pasado fueron los campeones del Mundial de Mini-Baloncesto en Argentina, se convirtieron en los vencedores invictos y absolutos del encuentro y acapararon la atención de México y el mundo por su forma magistral de jugar al basquetbol descalzos. Hoy, el equipo de niños triquis de Oaxaca no puede entrar a la cancha que fue construida para ellos.
En marzo de 2015, el gobierno federal les dio la cancha techada para que siguieran ahí sus entrenamientos y ahora, según el entrenador, el alcalde quiere comprometerlo a firmar un reglamento, pagar cuotas, comprar material y computadoras.
El asunto es que buena parte de los indígenas que practican este deporte lo hacen descalzos, como la selección que fue a Argentina.
Con información de: Proceso
0 comentarios