Municipios, pieza clave en el tratamiento de aguas residuales

por | Oct 22, 2019 | Noticias | 0 Comentarios

Por Martha Palma

Alcaldes de México | En México, cada cuatro segundos se generan alrededor de un millón de litros de aguas residuales, y de las dos mil 300 plantas de tratamiento municipal, solo funcionan el 40 por ciento.

Foto: Martha Palma / Alcaldes de México

Las plantas de tratamiento se vuelven inoperables debido a los altos costos de mantenimiento, que llegan hasta los 70 mil pesos mensuales, gasto difícil de costear para muchos municipios.

Sin embargo, existen alternativas para sustituir el uso de energía eléctrica en bombeo, como son los reactores anaerobios de flujo ascendente: consisten en cámaras de concreto inmaculadas con bacterias anaerobias, que digieren parte de la materia orgánica y liberan metano del agua para que ésta pase por otros procesos en la eliminación de fosfato y nitrógeno.

El tratamiento de aguas residuales contribuye al bienestar social y forma parte de los objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030 de la ONU. La meta 6.3 señala: “Mejorar la calidad del agua reduciendo la contaminación, eliminando el vertimiento y minimizando la emisión de productos químicos y materiales peligrosos, reduciendo a la mitad el porcentaje de aguas residuales sin tratar y aumentando considerablemente el reciclado y la reutilización sin riesgos a nivel mundial”.

Los ejidatarios también dependen del agua tratada para riego, principalmente en la cosecha de maíz, frijol, aba, coliflor, betabel, cilantro, acelgas y alfalfa, pero ante la falta de plantas de tratamiento se ven obligados a utilizar aguas negras.

Las aguas que no son tratadas llegan eventualmente a ríos, a cuerpos de agua y océanos.

De acuerdo con la asociación civil Controla Tu Gobierno, de las 24 plantas públicas pertenecientes a la subcuenca de los ríos Amecameca y La Compañía, nueve están en operación, once no funcionan, tres aún no se entregan y una presenta deficiencias en su tratamiento.

Cabe resaltar que la subcuenca forma parte de la región hidrológico-administrativa número XIII Valle de México, siendo esta la que cuenta con menos metros cúbicos de agua renovable por habitante al año y baja disponibilidad de agua, según datos de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA).

En el año 2010, se construyeron seis Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR), pertenecientes a la subcuenca, con una inversión de 226 millones de pesos, donde solamente una planta de tratamiento funciona correctamente, por ello, la asociación Controla Tu Gobierno solicita auditorías con enfoque humano a la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM) y CONAGUA, sobre el ejercicio de los recursos para la construcción de infraestructura en materia saneamiento e identificar posibles patrones de mal comportamiento.

A continuación, se describe la situación actual de algunas plantas pertenecientes a la subcuenca de los ríos Amecameca y La Compañía, con base en la información proporcionada por Controla Tu Gobierno.

Planta de tratamiento de San Mateo Huitzilzingo, Chalco

Inició su construcción en el año 2016 sobre un terreno particular, debido a los frecuentes hundimientos por las características lacustres del suelo, el costo de la obra aumentó un 26 por ciento, alcanzando un total de más de 109 millones de pesos, mediante contratos con seis empresas.

A tres años del proyecto, la comunidad aún no cuenta con agua tratada para el riego.

Foto: Martha Palma / Alcaldes de México

Planta de tratamiento de Temamatla

Para su construcción se han celebrado cinco contratos con diferentes empresas, que suman un total de 47 millones de pesos, entre recursos federales y estatales, provenientes del Programa de Tratamiento de Aguas Residuales 2015.

La obra permanece inconclusa debido a la cancelación de los recursos, a pesar de los 19 millones de pesos ejercidos.

Destacan las irregularidades en el incumplimiento de plazos de entrega, al igual que su ubicación entre los límites de Temamatla y Chalco, que dificulta que alguna de estas demarcaciones asuma los costos de operación, que ascenderían a un millón de pesos al año.

Foto: Martha Palma / Alcaldes de México

Planta de tratamiento de San Pablo Atlazalpan, Chalco

Las obras iniciaron en 2015, con un monto de 22 millones de pesos, mismas que permanecen inconclusas. Los ejidatarios solicitan en su carácter de pueblo originario, la entrega formal del sistema y del manual de operación respectivo, por medio de su comité autónomo denominado Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de San Pablo Atlazalpan (SAPASPA).

Asimismo, piden que el agua tratada llegue a las 500 hectáreas de tierra cultivable y no se arroje nuevamente al río Amecameca.

San Pablo Atlazalpan se distingue por el cultivo de maíz chalqueño y el teocintle silvestre.

Foto: Martha Palma / Alcaldes de México

Protección de los suelos

Eduardo Cota, director de Conservación y Restauración Ecológica de la asociación civil Pronatura, advierte sobre la importancia de proteger los suelos para la recarga de los acuíferos. “Su protección es un gran ausente en las políticas nacionales y se están perdiendo rápidamente. Un centímetro de espesor de suelo tarda aproximadamente un siglo en formarse y se puede perder en una fracción de segundos con una inundación. Se está deteriorando la capacidad de los suelos de retener y filtrar agua al subsuelo, poniendo en riesgo toda la productividad agrícola y forestal”.

Martha Palma Montes

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *