Expediente Abierto
►Agricultura Sustentable
Los beneficios de la agricultura sustentable
Aplicar buenas prácticas en el desarrollo de cultivos amigables con el medioambiente representa una estrategia en la que todos ganan: productores, las comunidades y los ecosistemas
FOTO: DAMIAN SÁNCHEZ /CUARTOSCURO
La agricultura sustentable consiste en un conjunto de prácticas que procuran el equilibrio del sistema agropecuario mediante la conservación del suelo, de la vida silvestre, uso responsable de agroquímicos, reducción de emisiones contaminantes y residuos.
En Chiapas, Tabasco, Oaxaca, Veracruz, Puebla, Guerrero y Colima, el sector cafetalero, por ejemplo, se distingue por sus prácticas sustentables certificadas, basadas en evitar la erosión del suelo y producir con menos elementos químicos.
Organizaciones como Proforest, especializadas en agricultura y forestación, recomiendan a los productores agruparse para dividir los costos de los esquemas de certificación, analizar los suelos, nutrirlos y así aplicar menos fertilizantes o herbicidas.
“En México, los productores se guían por usos y costumbres, conocimientos de una generación a otra, pero con el análisis de suelo, reduces costos porque usas menos fertilizante y das a la planta exactamente lo que necesita”, opina Omar Esteban Figueroa Trejo, Director de Proforest México.
Dicha organización ha trabajado con productores de café, caña, plátano, cacao y palma de aceite, durante 12 años, siempre bajo el enfoque de cuidar el suelo como patrimonio, la conservación del medioambiente y la vida silvestre.
Además, da asesorías para obtener la Certificación de Agricultura Sostenible y la Certificación Bonsucro para la producción sostenible de caña de azúcar, entre otras.
PROYECTOS EN MUNICIPIOS
Productores de los municipios de Cuetzalan y Hueytamalco, en Puebla, mapean los suelos para lograr una reconversión productiva a favor del maíz, los árboles frutales y la ganadería.
En el municipio de Ángel Albino Corzo, Chiapas, se han buscado usos alternativos de los productos derivados del proceso del café para su reciclaje, ya que, a partir de la pulpa o cascarilla, es posible generar otro tipo de productos útiles en sectores como la cosmetología, fármacos y biofertilizantes.
La promoción de la biodiversidad y de sistemas agrosilvopastoriles está presente en los municipios de Escárcega y Champotón, Campeche, y Villa Corzo, Arriaga y Jiquipilas, en Chiapas, donde el objetivo es acabar con la práctica de quitar árboles y sembrar pasturas para la actividad ganadera; y promover la reforestación con el apoyo de los ayuntamientos y otros actores locales, además de vincular las actividades madereras hacia árboles de rápido crecimiento.
Otro caso son los municipios que componen el Ejido de San Felipe, Nuevo León, que trabajan en la gestión de los territorios rurales para el desarrollo sostenible del semiárido, e identificar usos racionales del agua en la producción del maíz y hortalizas.
Asimismo, la Asociación Nacional de Ganaderos Diversificados Criadores de Fauna (ANGADI) captura carbono en pasturas, a fin de disminuir la emisión de gases de efecto invernadero.
Todas las iniciativas anteriormente mencionadas llevan implícito el uso racional de plaguicidas y fertilizantes orgánicos. Además, cuentan con el apoyo y supervisión del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA).
“Desde hace 80 años, el IICA fomenta políticas públicas en los tres niveles de gobierno, impulsa proyectos y programas de cooperación técnica, bajo el principio de desarrollo sostenible de los territorios rurales y urbanos; el uso de tecnologías apropiadas, alimentación y consumo de alimentos cada vez más sanos, bajo prácticas productivas sostenibles, sin poner en riesgo la habitabilidad del planeta”, explica Jaime Diego Montenegro Ernst, Representante y Coordinador de Asuntos Especiales Región Norte del IICA.
El Instituto fortalece las capacidades de productores locales a través de cursos presenciales o a distancia, sobre la recuperación productiva y ecoeficiente de los recursos naturales, mitigación de la erosión y empobrecimiento de los suelos.
Dirige la Iniciativa Sistemas Industrializados Localizados (SIAL) para industrializar los productos in situ, generar empleo y valor agregado en las comunidades; el proyecto INNOVA AF para el desarrollo sostenible del semiárido, con énfasis en agricultura familiar, y el Programa Suelos Vivos de las Américas y manejo integral de cuencas, que se aplicará en Zacatecas, San Luis Potosí, Guanajuato, Chiapas y Tamaulipas, en alianza con la Universidad de Ohio y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).
El programa promueve la captura de carbono de los suelos, su labranza de conservación, la nutrición integral de cultivos a partir del análisis de suelo, suprimir la quema de pastos, introducir cultivos de cobertura de siembra, una vez al año, para regenerar los suelos y cuidar el origen del recurso hídrico a partir de la organización de los agricultores.
PROGRAMA PRODUCCIÓN PARA EL BIENESTAR
La Sader maneja el Programa de Producción para el Bienestar, cuyos objetivos son aumentar la productividad de los medianos y pequeños productores de hasta 20 hectáreas, que representan 90 por ciento de los productores del país, de las cuales, un millón 200 mil son de zonas indígenas; contribuir al bienestar de la población rural e incrementar prácticas de producción sustentable.
Con el fin de atender las principales problemáticas de los pequeños y medianos productores que, según datos de la dependencia federal, generan 54 por ciento del valor de la producción agrícola nacional y 85 por ciento del empleo pagado, surge el Plan de Transición Agroecológica en maíz, frijol, trigo, arroz, milpa, café, cacao, chía y amaranto, incluido en las reglas de operación del Programa Producción para el Bienestar, con 2.2 millones de productores atendidos en 2021.
El plan considera al suelo como un ente vivo y propone recuperar sus capacidades de oxigenación, infiltración del agua y nutrición, mediante prácticas agroecológicas.
“Definimos prácticas agroecológicas para la generación de semillas y bioinsumos, con ello, los productores reducen costos, la dependencia a los fertilizantes y aumentan sus rendimientos. Hemos certificado a mil 99 técnicos locales distribuidos en 27 estados para dar acompañamiento y construir saberes en conjunto con los productores, también ponemos a su disposición los materiales de capacitación agrupados en una plataforma digital”, refiere Héctor Manuel Robles Berlanga, Director General de Organización para la Productividad de la Subsecretaría de Autosuficiencia Alimentaria de la Sader.
En diciembre de 2021, la Secretaría presentó la Estrategia Nacional de Suelo para la Agricultura Sostenible, que busca contribuir a detener y revertir los procesos que afectan a los suelos, atender los desafíos del cambio climático, disponibilidad de agua y pérdida de diversidad biológica.